Unos 5.000 abortos se han realizado en Uruguay en el año transcurrido desde su despenalización, pero aún hay “dificultades” para la interrupción del embarazo, según se anunció al cumplirse un año desde la entrada en vigor de la nueva ley. Dicha ley no legaliza técnicamente el aborto, sino que lo despenaliza siempre que se sigan ciertos procedimientos regulados por el Estado.