Un sorpresivo resultado en la segunda vuelta este domingo en las elecciones anticipadas en Francia evitó la llegada al gobierno de la derechista Agrupación Nacional (RN) de Marine Le Pen, pero dejó al país preguntándose por su futuro más próximo, posiblemente bajo la alianza de izquierdas de socialistas, izquierdistas, comunistas y verdes conocida como Nuevo Frente Popular (NFP), que se consolidó en menos de una semana para evitar “lo peor”. La participación fue históricamente alta, alcanzando el 67%.
La disolución de la URSS en 1991 suponía la victoria definitiva del capitalismo. Sin embargo, hoy el socialismo se ha vuelto a poner de moda, según una reciente publicación The Economist.
El primer ministro francés, Bernard Cazeneuve, oficializó el miércoles la dimisión de su cargo y la del gobierno que lidera ante el mandatario saliente, el socialista François Hollande, y dio así inicio a un período de transición política.