A imagen y semejanza de sus lugares de culto, que se multiplican como hongos en las diversas capitales latinoamericanas, los movimientos evangélicos acrecientan su influencia en la vida política de un subcontinente tradicionalmente católico. El desarrollo de estas iglesias, opuestas al derecho al aborto, al casamiento entre homosexuales, a la legalización de la marihuana y a la “ideología de género”, se traduce en un aumento del voto conservador, según señalan expertos.
El presidente Donald Trump afirmó ante personalidades evangélicas que los demócratas van a proceder “rápido y de manera violenta” a realizar cambios si los republicanos pierden el control del Congreso en las elecciones de noviembre.
Javier Bertucci, 48 años, líder de la iglesia Maranatha y de la asociación civil El Evangelio Cambia, anunció oficialmente que competirá en las elecciones presidenciales de Venezuela. Así, busca desafiar a Nicolás Maduro en una jornada electoral en la que no competirá la alianza Mesa de Unidad Democrática, la principal coalición opositora.