La economía de Brasil al inicio del segundo mandato de la reelecta Dilma Rousseff enfrenta importantes riesgos entre los cuales que el ajuste sea considerado insuficiente; un posible racionamiento de energía; el impacto del escándalo de corrupción de Petrobras al igual que el inicio de un ciclo de aumento de tasas de interés por parte de la Fed, según la evaluación del banco español BBVA.