El Papa Francisco no juzgó necesario este domingo comentar las graves acusaciones vertidas en su contra en un texto publicado por un ex nuncio, en el que se lo acusa de haber encubierto el accionar del cardenal estadounidense Theodore McCarrick, acusado públicamente en julio de abusos sexuales.
Un grupo de nueve víctimas del cura chileno pedófilo Fernando Karadima se reunirá a comienzos de junio en el Vaticano con el papa Francisco. El pontífice ajusta una profunda reestructuración de la Iglesia católica de Chile, sumida en una enorme crisis tras una serie de escándalos de abusos sexuales.
El sacerdotes español Jordi Bertomeu, que participó en la redacción del informe sobre abusos a menores en Chile, afirmó en Roma que la decisión del papa Francisco de convocar a los obispos chilenos al Vaticano es excepcional.
Las tres víctimas chilenas de abusos sexuales cometidos por el sacerdote Fernando Karadima pidieron al papa Francisco “acciones ejemplares” contra abusadores y encubridores que han desacreditado a la Iglesia católica en todo el mundo.
El papa Francisco inició este viernes en el Vaticano la ronda de reuniones especiales con las tres víctimas de abusos sexuales cometidos en Chile por el cura Fernando Karadima. ”Vamos a aportar nuestro grano de arena. Que ojalá sea el fin de la cultura de abuso y encubrimiento por parte de los obispos en la iglesia”, declaró a la prensa Juan Carlos Cruz, quien estaba acompañado por James Hamilton y José Andrés Murillo, las otras dos víctimas invitadas por el Papa.
A una semana de asumir la dirección del Gobierno chileno, el Presidente electo, Sebastián Piñera, abordó distintos temas, entre ellos las denuncias de abuso sexual de religiosos. En esa línea, el próximo mandatario criticó a la Iglesia católica chilena y al Vaticano.
“Piensen con la cabeza y no se dejen llevar de las narices por todos los zurdos que son los que armaron la cosa”. Esas fueron las palabras del Papa Francisco al referirse a las acusaciones contra el obispo chileno de Osorno, Juan Barros, quien ha sido denunciado como presunto encubridor de los abusos imputados al ex párroco Fernando Karadima.