Un informe emitido por el Organismo Supervisor de la Inversión en Energía y Minería (Osinergmin) de Perú encontró que las “olas anómalas” no fueron la causa del gran derrame de petróleo frente a las costas de Ventanilla.
Las autoridades de la Región de Magallanes en el extremo sur de Chile informaron que hubo un importante derrame de hidrocarburos proveniente de una planta de YPF en Tierra del Fuego (sector de Cullen), localidad casi colindante con Argentina.