El Primer Ministro de Corea Chung Hong-won renunció tras las duras críticas de familiares y la opinión pública del país que lo acusaron de no hacer lo suficiente para salvar a más sobrevivientes así como por las deficientes tareas de rescate del ferry Sewol que transportaba 476 personas, mayoritariamente estudiantes, y que se estima causó la pérdida de 300 vidas.