Los tweets de Donald Trump el pasado 5 de mayo agravaron la tensión entre China y Estados Unidos, lo que desencadenó dramáticamente nuevas especulaciones sobre las condiciones un cualquier nuevo acuerdo comercial. China tomó represalias ante los nuevos aranceles de Estados Unidos sobre sus productos, y aplicó impuestos a las importaciones de EEUU. Esta medida interrumpió un largo periodo de calma que comenzó después de la reunión del G20 el 1 de diciembre.