La gobernación del estado brasileño de Sao Paulo admitió que hubo un error de comunicación durante el operativo de seguridad para proteger a las autoridades que asistieron a la apertura del Mundial de fútbol Brasil 2014, el 12 de junio.
La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, afirmó este viernes que no se intimida con insultos ni con agresiones, aunque sean físicas, en un discurso en el que respondió a los abucheos vulgares que recibió la víspera en la inauguración del Mundial Brasil.
La austera fiesta inaugural de Brasil 2014 duró apenas 26 minutos y el estadio Arena Corinthians no estuvo lleno.