Los ministros argentinos de Salud y Trabajo, Carla Vizzoti y Claudio Moroni respectivamente, aprobaron el martes una resolución conjunta por la que los empleadores ahora pueden exigir a los trabajadores que hayan recibido al menos una dosis de cualquier vacuna contra el coronavirus que regresen al trabajo presencial independientemente de su edad y / o condiciones de riesgo adicionales.