La caída de los mercados bursátiles asiáticos desató un efecto dominó de lunes negro este 5 de agosto. Para el Nikkei japonés, una caída del 12,4% fue la segunda más profunda de su historia. Como resultado, los temores de una recesión en Estados Unidos han aumentado tras las caídas globales de la semana pasada.
En la víspera del aniversario del Día de la Independencia de Estados Unidos, Wall Street cerró este miércoles en verde, alcanzando récords históricos en sus tres índices ante la creciente expectativa de los inversionistas de que la Reserva Federal (Fed) baje las tasas de interés a fin de mes.
Wall Street sufrió el martes importante pérdidas, debido a las crecientes tensiones comerciales entre Estados Unidos y China. Un escenario similar ocurrió con las bolsas de Europa. Al término de la sesión en la Bolsa de Nueva York, el Dow Jones cayó 1,79% hasta los 25.965,09, mientras que el selectivo S&P 500 retrocedió un 1,65 %, hasta los 2.884,05.
Las acciones de la gigante Nike bajaron en la Bolsa de Nueva York, tras la insólita lesión que sufrió una de las máximas figuras del básquetbol universitario estadounidense (NCAA), luego que su zapatilla de la marca sufriera serios daños.
La Bolsa de Nueva York cerró su última sesión de 2018, un año de gran volatilidad en el que Wall Street pasó de registrar récords en sus indicadores bursátiles a marcar sus peores doce meses en una década, debido al temor a una ralentización de la economía global. Entre enero y diciembre, el Dow Jones se cayó en torno al 5,6 %, el S&P 500 un 6,2 % y el Nasdaq un 3,9 %, las peores caídas desde 2008, cuando los tres índices se dejaron un 33,8 %, un 38,5 % y un 40% respectivamente.
La Bolsa de Nueva York (NYSE) nombró a una mujer como presidenta por primera vez en sus 226 años de historia, informó un vocero de la empresa matriz Intercontinental Exchange (ICE).