Argentina había sido invitada a unirse a la organización en 2022, pero declinó la invitación durante la presidencia de Alberto Fernández Argentina ha iniciado formalmente la fase técnica de su candidatura para unirse a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), presentando su memorando inicial ante el organismo con sede en París. El documento, una autoevaluación preliminar sobre la alineación del país con los estándares internacionales, fue entregado por el Ministro de Relaciones Exteriores, Pablo Quirno, al Secretario General de la OCDE, Mathias Cormann, quien se encuentra de visita en Buenos Aires.
Esta presentación marca un cambio significativo en la política exterior impulsada por la administración del Presidente Javier Milei. La OCDE, a menudo denominada el club de los países ricos, extendió una invitación a Argentina en enero de 2022, pero el gobierno del entonces mandatario Alberto Fernández declinó continuar con el proceso.
La administración de Milei aceptó formalmente la invitación el 11 de diciembre de 2023, un día después de que el Presidente asumiera el cargo, y desde entonces ha acelerado el proceso.
El memorando inicial es un documento clave que evalúa el grado de alineación entre la legislación, las políticas y las prácticas actuales de Argentina y el conjunto integral de estándares de la OCDE. Su presentación da inicio a un diálogo técnico profundo con 25 comités de expertos que abarcan áreas clave, como el clima de inversión, los mercados financieros y el desarrollo regional.
El Secretario General Cormann enfatizó los beneficios del proceso, afirmando que la adhesión a la OCDE complementa la ambiciosa agenda de reformas económicas de Argentina, contribuyendo a fortalecer las bases para el crecimiento a mediano y largo plazo mediante reformas estructurales.
Cormann subrayó que se espera que el proceso sea mutuamente beneficioso al fortalecer la confianza internacional en las políticas argentinas, promover un mayor crecimiento y elevar los ingresos y el nivel de vida en la economía del G20.
A principios de semana, en Asunción (Paraguay), el Presidente Santiago Peña insistió en que su país era un socio ideal para la adhesión a la OCDE, citando logros recientes, como la superación de la inestabilidad típica de los países subdesarrollados. En su discurso en el Banco Central del Paraguay (BCP), Peña recalcó que su país ha logrado consolidarse gradualmente como una potencia media. Es un país que ha dejado atrás los problemas de los países subdesarrollados. Además, Peña señaló que Paraguay había obtenido una calificación de grado de inversión en 2024 e insistió en que la adhesión a la OCDE se había acelerado durante su gobierno.
En una reunión con Cormann, Peña abordó los requisitos esenciales para la membresía, incluyendo el progreso en transparencia, desarrollo institucional e integridad pública. El mandatario de Colorado enfatizó el compromiso de su gobierno de priorizar los estándares de la OCDE para acelerar ese proceso. Añadió: Para nosotros, será un gran legado poder concluir nuestra administración con un camino más claro hacia la plena membresía.
Una Cumbre Ministerial de la OCDE, copresidida por Paraguay y Colombia en Asunción, bajo el lema Construyendo confianza, integridad, infraestructura de calidad y servicios públicos optimizados con IA, reunió a autoridades, líderes internacionales y expertos de América Latina y el Caribe.
El ministro de Economía de Paraguay, Carlos Fernández Valdovinos, presidió las sesiones, que se centraron en el Plan de Acción 2018 sobre Integridad para la Buena Gobernanza. Los debates se centraron específicamente en la restauración de la confianza mediante la lucha contra la corrupción, la promoción de la buena gobernanza en infraestructura y el aprovechamiento de la transformación digital para aumentar la eficiencia y la transparencia en la administración pública.
Por su parte, el ministro de Relaciones Exteriores, Rubén Ramírez Lezcano, destacó posteriormente la importancia de fortalecer la confianza en las instituciones públicas, señalando que la gobernanza y la rendición de cuentas son esenciales para consolidar democracias sólidas.
La OCDE cuenta actualmente con 38 países miembros plenos, entre ellos naciones latinoamericanas como Chile, Colombia, Costa Rica, México y Uruguay.