El gobierno francés del presidente Emmanuel Macron reconoció oficialmente la condición de Estado de Palestina este lunes, tras decisiones similares tomadas el día anterior por el Reino Unido, Canadá, Australia y Portugal.
La medida se anunció en una cumbre sobre la solución de dos Estados organizada por Francia y Arabia Saudí, que fue boicoteada tanto por Estados Unidos como por Israel.
Ha llegado el momento. Fiel al compromiso histórico de mi país con Oriente Medio y con la paz entre israelíes y palestinos, declaro que hoy Francia reconoce el Estado de Palestina, declaró Macron desde el podio de las Naciones Unidas en Nueva York, afirmando que se trata de una solución que traerá la paz a Israel y una derrota para Hamás y para todos aquellos que incitan al odio antisemita.
El líder europeo de izquierdas argumentó que, si bien el ataque del 7 de octubre de 2023 era una herida aún abierta, la guerra en Gaza ya no estaba justificada, por lo que exigió un alto el fuego inmediato y la liberación de los 48 rehenes aún retenidos por la organización terrorista Hamás.
Macron propuso una administración de transición para Gaza tras el cese de las hostilidades e insistió en que Francia estaba dispuesta a ayudar a entrenar a las fuerzas de seguridad palestinas para desmantelar y desarmar a Hamás. Una embajada francesa se abriría en Palestina una vez que se cumplieran estas condiciones.
La decisión de Francia y de las otras potencias occidentales aumentó la presión internacional sobre Israel, donde el primer ministro Benjamin Netanyahu reaccionó de manera adversa.
Tengo un mensaje claro para los líderes que reconocen un Estado palestino tras la horrible masacre del 7 de octubre: están recompensando al terrorismo con un premio enorme, declaró el domingo. Y tengo otro mensaje para ustedes: eso no sucederá. No habrá un Estado palestino al oeste del río Jordán, añadió.
Por su parte, líderes palestinos consideraron el reconocimiento como un paso importante y necesario hacia una paz justa y duradera.
El gobierno estadounidense del presidente Donald Trump también criticó la decisión, advirtiendo de consecuencias desastrosas y acusando a las naciones de favorecer la violencia en lugar de la diplomacia.