Un ataque armado este domingo por la mañana frente a una discoteca en Santa Lucía, provincia del Guayas (Ecuador), dejó ocho personas (siete hombres y una mujer) muertas y varias heridas. Entre las víctimas se encontraba el dueño de la discoteca, Jorge Urquizo, y hermano del alcalde, Ubaldo Urquizo.
Un número indeterminado de sicarios en motocicletas u otros vehículos en movimiento (otros testigos mencionaron dos camionetas) abrieron fuego contra un grupo que se encontraba frente al edificio. Se recuperaron numerosos casquillos de bala en el lugar. Las autoridades creen que la balacera podría estar relacionada con conflictos entre bandas criminales rivales.
Los autores huyeron de la zona. Se realizó un arresto más tarde el domingo, pero las autoridades aún no han corroborado si el sospechoso estaba relacionado con el ataque.
Guayas es una de las provincias más violentas de Ecuador y se encuentra actualmente bajo un estado de emergencia recientemente renovado. El ataque es el último de una ola de violencia que ha azotado al país, convertido en un importante punto de tránsito para el narcotráfico. Esto ha provocado un aumento significativo de homicidios y enfrentamientos entre bandas armadas que se disputan el control del territorio. El incidente del domingo fue el último de una serie de actos violentos, incluyendo un tiroteo similar en un bar hace dos semanas que dejó 17 muertos.
Según fuentes policiales, siete de las víctimas murieron en el acto, mientras que la octava fue trasladada de urgencia a un hospital con vida, aunque sin éxito.
Se sabe que al menos 11 bandas armadas operan en la provincia del Guayas, que se disputan el control de territorios urbanos, fluviales y portuarios.
Nos unimos en el dolor y la oración por este acto violento que ha golpeado a nuestra comunidad, declaró la alcaldía en redes sociales.