Los médicos que tratan al expresidente brasileño Jair Bolsonaro dijeron este jueves que su salud empeoró después de recibir a un oficial del Supremo Tribunal Federal (STF) el miércoles en su sala de la Unidad de Cuidados Intensivos en el Hospital Estrella del DF en Brasilia.
Bolsonaro, que fue sometido a una cirugía intestinal hace casi dos semanas, sufrió un deterioro clínico, incluyendo presión arterial elevada y empeoramiento de los resultados de las pruebas hepáticas. Más adelante se le iban a realizar nuevos exámenes para comprobar con mayor precisión su estado de salud.
El ex mandatario está en ayunas orales, recibe nutrición parenteral, fisioterapia motora y medidas preventivas contra la trombosis venosa. No se permiten visitas y no hay pronóstico de alta de la UCI. Su estado se deriva de complicaciones relacionadas con un apuñalamiento en la campaña de 2018, que requirió su sexta intervención quirúrgica.
El miércoles, un agente judicial del STF entró en la UCI para notificarle una demanda por un supuesto intento de golpe de Estado en 2022 tras su derrota electoral frente a Luiz Inácio Lula da Silva. Bolsonaro, furioso por la notificación, la calificó de táctica de un régimen nazi y afirmó que se trata de un intento de impedir su candidatura presidencial para 2026.
”¿Tengo cinco días para presentar mi defensa? ¿Cinco días? (...) ¿Es consciente de que está dentro de una unidad de cuidados intensivos?. gritó entonces Bolsonaro. En un video publicado más tarde en sus redes sociales, insistió en que no tiene intención de abandonar el país y afirmó que el juez del STF Alexandre De Moraes busca arrestarlo y condenarlo.
El tribunal pretende impedir que me juzguen en 2026, así como quieren impedir que me presente libre a las elecciones porque saben que, en una contienda justa, no hay candidato capaz de vencerme, sostuvo también. El proceso contra mí avanza a una velocidad 14 veces mayor que [otros] y por lo menos 10 veces mayor que el que se siguió contra Lula en Lava Jato”, prosiguió.
Bolsonaro se ha mantenido activo en las redes sociales, criticando al poder judicial y manteniendo su influencia política a pesar de su salud y sus batallas legales.