El Tribunal Constitucional (TC) de Chile resolvió este jueves por 8 votos a favor y 2 en contra la destitución de Isabel Allende, hija del expresidente Salvador Allende, por su participación en el intento de que el gobierno del presidente Gabriel Boric Font comprara la casa del exjefe de Estado para convertirla en un museo en honor al líder socialista derrocado por el golpe militar de Augusto Pinochet Ugarte en 1973.
El turbio acuerdo también le costó a Maya Fernández su puesto como ministra de Defensa. Fernández es sobrina de Isabel Allende y nieta de Salvador.
El fallo del TC fue impulsado por una solicitud del Partido Republicano y la coalición Chile Vamos de centroderecha. El TC determinó que Allende, veterana parlamentaria con 31 años de experiencia y heredera política del exmandatario, violó la Constitución al participar en negociaciones de contratos estatales, prohibidas por el Artículo 60.
El proyecto, iniciado en 2023 y aprobado en la Ley de Presupuesto de 2024, involucraba a la senadora Allende y a su sobrina como copropietarias de la finca. Allende se reunió con funcionarios del gobierno, y su yerno, Felipe Vio, propuso transferir la casa a la Fundación Allende, presidida por su hija, Marcia Tambutti.
A pesar de los planes iniciales, la compra se trasladó del Servicio de Patrimonio Cultural al Ministerio de Bienes Nacionales, y la idea del museo se abandonó por falta de fondos y la exclusión del mobiliario.
El fallo del jueves —la primera decisión de este calibre del TC en sus 50 años de historia— significó un revés para la coalición de izquierda de Boric, así como para el Partido Socialista, que ahora debe nombrar un sucesor en la Cámara Alta para completar el mandato de Allende. Además, Allende y Fernández enfrentan una investigación penal dirigida por el fiscal Patricio Cooper, tras una denuncia del abogado republicano Raimundo Palamara.
Dada la ausencia de Boric debido a un viaje oficial a la India, la ministra portavoz Aisén Etcheverry expresó el pesar de La Moneda por la decisión del TC, que, en su opinión, sentó un grave precedente. Sin embargo, Etcheverry reconoció la autonomía del TC al tiempo que defendió la carrera parlamentaria de Allende e insistió que la familia actuó de buena fe.
Como Poder Ejecutivo, debemos respetar las decisiones del TC, pero no podemos sino lamentar una decisión que, según los antecedentes que tenemos, sentaría un grave precedente, argumentó Etcheverry.
Por su parte, Allende emitió un comunicado en el que destacó que como familia acordamos y seguimos todos los trámites legales para la compra, la cual nunca se materializó, como argumentó nuestro abogado, el Sr. Gabriel Osorio, ante el pleno del Tribunal Constitucional.
Siempre actuamos de buena fe y nunca recibimos un peso por un proyecto que no prosperó. Estos argumentos aparentemente no fueron considerados por la mayoría del tribunal. Lo lamentamos, enfatizó.
En cuanto a su difunto padre, quien falleció durante el levantamiento militar, la ahora exsenadora argumentó que la memoria del presidente Allende permanecerá intacta porque el fallo no la empaña.
Aunque ”no habrá museo (...), seguirá habiendo calles y plazas con su nombre en Chile y el mundo”, subrayó.