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Falleció a los 95 años una fundadora de Madres de Plaza de Mayo
“La desaparición de mi hija fue algo terrible y lo sigue siendo”, dijo alguna vez Aída Bogo de Sarti, integrante fundadora de la Línea Fundadora Madres de Plaza de Mayo, falleció el pasado sábado a los 95 años, según se anunció este lunes en Buenos Aires. Bogo se convirtió en un icono de la resistencia tras el secuestro y desaparición de su hija, Beatriz Sarti, en mayo de 1977 durante la dictadura (1976-1983). Junto a otras madres como Azucena Villaflor, convirtió su dolor personal en una lucha de por vida por la memoria, la verdad y la justicia. “Las madres nos vamos despidiendo poco a poco, dejando el mejor legado que podemos”, señaló la organización en un comunicado.
Nacida en Argentina en 1929, Aída pasó sus primeros años en España antes de regresar a Buenos Aires, donde trabajó como costurera y militó políticamente en el peronismo. Después de que Beatriz, miembro de la organización guerrillera Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP), fuera capturada, Aída soportó múltiples allanamientos en su casa y buscó incansablemente a su hija, hasta que finalmente se unió a las Madres de Plaza de Mayo. “Rompieron mis puertas, se llevaron todo lo que quisieron menos los muebles, dejaron todo tirado”, dijo en el libro Las Viejas.
Siguió siendo una defensora vocal, organizó el archivo del grupo y compartió su historia con las generaciones más jóvenes. Su muerte fue lamentada por sus compañeros activistas, que elogiaron su legado.
“Una de las cosas que nos salvó fue poder reunirnos en la Plaza de Mayo”, dijo en una de sus charlas con escolares. “La desaparición de mi hija fue algo terrible, y lo sigue siendo”, agregó. “Cualquier madre a la que le hubiera pasado lo mismo hubiera salido a la calle. Somos el ejemplo de haber enfrentado a la dictadura miles de veces”.
