El número de argentinos que buscan comenzar de nuevo en Uruguay en el primer año del mandato del presidente Javier Milei se ha más que duplicado, según datos publicados este lunes en Montevideo. Luego de que la migración argentina a Uruguay aumentara en un 64% hasta alcanzar las 3.639 solicitudes en menos de un año, las autoridades locales comienzan a reflexionar sobre su posible impacto en la demografía y la estructura social del país.
En 2023, 2.216 argentinos presentaron sus documentos para reubicarse al otro lado del charco, mientras que las mencionadas 3.639 solicitudes se registraron entre enero y noviembre de 2024.
Con una inflación del 211%, una recesión persistente y una tasa de pobreza del 45%, muchos argentinos han optado por buscar una nueva vida en Uruguay. A pesar de los esfuerzos de Milei, el aumento de las solicitudes de residencia sugiere que la situación en Argentina sigue siendo crítica.
Según la Dirección Nacional de Migraciones de Uruguay, los argentinos representan el grupo más numeroso entre los 14.864 extranjeros que solicitaron su residencia, con una participación del 25% del total. La mayoría de estas solicitudes se tramitan a través de la vía del Mercosur Permanente, que ofrece un proceso simplificado, se explicó.
Los solicitantes deben presentar una serie de documentos, incluida una foto de pasaporte, un documento de identidad válido y un certificado de antecedentes penales de los últimos cinco años. También se necesita un certificado de vacunación que demuestre que el solicitante cumple con los requisitos de Uruguay en este sentido.
La mayoría de los argentinos ha solicitado la residencia permanente, y sólo se recibieron 259 pedidos de estadía temporal vinculadas principalmente a estudios o trabajo. Además, Montevideo confirmó que casi el 100% de las solicitudes de residencia permanente de argentinos son aprobadas.
Detrás de los argentinos, los cubanos ocuparon el segundo lugar con 3.104 solicitudes, lo que representa el 17,6%, seguidos por 2.848 brasileños y 1.854 venezolanos.
A mediados de 2024, el presidente de Uruguay, Luis Lacalle Pou, implementó medidas para facilitar la llegada de venezolanos y cubanos en busca de refugio. Se introdujeron programas específicos para facilitar la residencia y el reconocimiento de la condición de refugiado, con el fin de hacer frente al aumento de las solicitudes de asilo. Hasta junio de 2024, las solicitudes de refugio de venezolanos llegaron a 3.870, la cifra más alta desde 2016. Las solicitudes de refugio de cubanos también han aumentado, alcanzando las 20.950 en 2024.
Además, los gobiernos de Argentina y Uruguay han dado pasos hacia el reconocimiento recíproco de títulos universitarios y licencias de conducir, lo que podría influir en futuras solicitudes de residencia.
El presidente electo de Uruguay, Yamandú Orsi, ha expresado la importancia de mantener buenas relaciones con el gobierno de Milei a pesar de sus diferencias ideológicas.