El Índice Nacional de Precios al Consumidor Amplio (IPCA) del mayor país de Sudamérica se situó en noviembre en el 0,39%, según el relevamiento del Instituto de Geografía y Estadística (IBGE) divulgado este martes, informó la Agencia Brasil. Las nuevas cifras representaron una desaceleración respecto al 0,56% de octubre, lo que no indica una caída de los precios, sino un menor ritmo de aumentos, ya que los alimentos siguieron impulsando el IPCA al alza.
En los últimos 12 meses, la inflación oficial alcanzó el 4,87%, superando el objetivo del Gobierno del 3%, con una banda de tolerancia de ±1,5% puntos porcentuales. En lo que va de año, de enero a noviembre, el IPCA ha subido un 4,29%.
Si el IPCA supera el 0,20% en diciembre, superará el objetivo, advirtió el director de encuestas del IBGE, André Almeida.
En noviembre, los alimentos y bebidas subieron un 1,55%, contribuyendo con 0,33 puntos porcentuales a la inflación general, y la carne subió un 8,02%, con un impacto de 0,20 puntos porcentuales en el índice.
La menor disponibilidad de animales para el sacrificio, combinada con el aumento de los volúmenes de exportación, provocó una disminución de la oferta interna del producto, explicó Almeida.
El transporte fue otro impulsor de la inflación en noviembre, que aumentó un 0,89%, contribuyendo con 0,13 puntos porcentuales al IPCA general. El principal impulsor fue el aumento del 22,65% en los precios de los billetes de avión, que experimentaron el mayor incremento de precios entre todos los productos y servicios rastreados por el IBGE.
La proximidad del fin de año y los numerosos días festivos del mes pueden haber contribuido a este aumento, dijo Almeida.
En el lado positivo de la inflación de noviembre, los combustibles experimentaron un descenso del 0,15%, impulsado por las bajadas de los precios del etanol (-0,19%) y la gasolina (-0,16%).
Los costes de la vivienda experimentaron una inflación negativa en noviembre, con un descenso del 1,53%, contribuyendo en 0,24 puntos porcentuales al IPCA. Esto se debió principalmente a una caída del 6,27% en los precios residenciales de la electricidad, atribuida a la bandera amarilla en las facturas de electricidad en noviembre, frente a la bandera roja en el mes anterior.
El IPCA hace un seguimiento del coste de la vida para los hogares con ingresos comprendidos entre uno y 40 salarios mínimos, con datos de precios recogidos en las 10 mayores regiones metropolitanas del país.
El comportamiento del IPCA es un indicador clave para el tipo de interés básico del país, la Selic, que fija el Comité de Política Monetaria (Copom) del Banco Central de Brasil.