Las autoridades brasileñas anunciaron este viernes que el Aeropuerto Internacional Salgado Filho (POA/SBPA) de Porto Alegre, en el estado de Rio Grande do Sul, reanudará sus operaciones el próximo lunes, tras seis meses inoperativo debido a las inundaciones sin precedentes. Las compañías aéreas llevan vendiendo billetes para estos vuelos desde agosto.
Antes de Navidad, el aeropuerto estará 100% operativo, [incluidos] los vuelos internacionales, aseguró el secretario de Comunicación de la Presidencia, Paulo Pimenta, en un vídeo publicado en redes sociales. Él y el ministro de Puertos y Aeropuertos, Silvio Costa Filho, aterrizaron este viernes por la mañana en Salgado Filho a bordo de un avión de la Fuerza Aérea Brasileña (FAB) para participar en la ceremonia de reapertura.
Las operaciones volverán gradualmente. Al principio, sólo se atenderán 128 aterrizajes y despegues diarios de Azul, Gol y Latam entre las 8 y las 22.
El aeropuerto de Salgado Filho ha estado cerrado a las operaciones aéreas desde las fuertes lluvias e inundaciones que azotaron el estado el pasado mes de abril, que dejaron la pista del aeropuerto sumergida durante 23 días.
También estuvieron presentes en el acto del viernes la Directora General de Fraport Brasil, Andrea Pal, el Vicegobernador de Rio Grande do Sul, Gabriel Souza, y el Teniente de Alcalde de Porto Alegre, Ricardo Gomes.
El Gobierno federal contribuyó con 426 millones de reales (74,83 millones de dólares) a los esfuerzos de Fraport para poner de nuevo en servicio la terminal aérea. Tenemos que reconstruir lo que se perdió. Tenemos que asegurarnos de que una situación como ésta no vuelva a repetirse. Vamos a construir un sistema de contención moderno y eficaz que aporte seguridad, para que las empresas puedan trabajar, para que los empresarios estén tranquilos, pero también para que las familias puedan vivir en sus barrios, subrayó Pimenta.
Durante el acto del viernes, Gomes criticó a quienes intentaron culpar a la administración local del percance e insistió en que nunca se podría haber previsto tal cantidad de agua. El volumen de agua que fue necesario para inundar esta pista con la altura que el agua alcanzó, en sí mismo habla, yo diría, de la irresponsabilidad de aquellos que intentaron atribuir el volumen de agua que llegó aquí a una o dos casas de bombas, o a una única compuerta, dijo.