El presidente colombiano, Gustavo Petro, criticó el avance de los líderes de la derecha mundial que corean Viva la libertad, carajo, pero se refieren sólo a la libertad del 1% más rico de la población mundial. Aunque no lo mencionó por su nombre, Petro se refería sin duda al grito de guerra de su colega argentino Javier Milei. Su sentimiento mercantilista y libre conduce a la destrucción de la atmósfera y de la vida, señaló en defensa del medio ambiente el primer mandatario de izquierdas de la historia de Colombia.
Desde el corazón de la tierra invitamos a todos los países a hacer un acto de conciencia, a dejar a un lado la codicia que está acabando con el ser humano y con la madre tierra, y a dar un paso hacia la paz total, dijo Petro citando a su propia hija.
Milei habló en términos despectivos de Petro durante su campaña electoral del año pasado, mientras el ex guerrillero lo comparaba con el ex Führer nazi Adolf Hitler. En enero, Milei describió a Petro como un comunista asesino que está hundiendo a Colombia; en marzo, también le llamó terrorista, tras lo cual Bogotá expulsó a la misión diplomática argentina.
El poder de un país en el mundo ya no se ejerce por el tipo de sistema económico o político o por las ideas que irradia, sino por el poder de destruir la vida de la humanidad, insistió Petro. En cuanto a la actual crisis de Oriente Próximo, el líder sudamericano se puso del lado de la causa palestina y subrayó que cuando muera Gaza, morirá la humanidad. También habló de un genocidio supuestamente causado allí por las fuerzas israelíes a pesar de las reclamaciones mundiales contra tal despliegue. Los presidentes de los países que pueden destruir a la humanidad no nos escuchan cuando votamos para detener el genocidio en Gaza, a pesar de que somos la mayoría de los presidentes del mundo, señaló.
Hoy tenemos 20.000 niños asesinados bajo las bombas y los presidentes de los países de la destrucción humana se ríen en estos pasillos con la ayuda del poder de comunicación de los medios mundiales, que hoy son propiedad de los grandes capitales y reordenan el mundo sin democracia, sin libertad, añadió.
El proyecto democrático de la humanidad se muere de vida, mientras los racistas, los supremacistas, los que creen estúpidamente que los arios son la raza superior se preparan para dominar el mundo, sostuvo.
También resaltó que el 1% de la humanidad tiene más riqueza que el 95% de toda la humanidad junta. Es en esta desigualdad, la mayor de nuestra historia como especie, donde encontramos la lógica de la destrucción masiva, desatada en la crisis climática, subrayó al tiempo que instó a ese “1% de la humanidad” responsable “de la crisis climática” a tomar conciencia de sus consecuencias a largo plazo para el planeta. También dijo que los numerosos incendios forestales, como los de la selva amazónica, son una prueba del calentamiento global y la crisis climática.
”Si los gobiernos no pudieron como se demostró aquí (...) entonces es hora de tomar la solución de los grandes problemas de la humanidad, en manos de la propia gente”, sugirió también Petro.