La Policía Federal (PF) de Brasil imputó este martes al expresidente Jair Bolsonaro por la presunta falsificación de su cartilla de vacunación Covid-19.
El caso pasa ahora al Ministerio Público para que tome una decisión final sobre si presenta o no cargos formales contra el ex jefe de Estado, su entonces ayudante de campo, el teniente coronel Mauro Cid, y el diputado Gutemberg Reis, así como otras 14 personas que figuran en la investigación.
Se cree que Bolsonaro y miembros de su familia introdujeron información falsa en la base de datos del Ministerio de Salud para obtener una prueba de vacunación que les permitiera entrar en Estados Unidos. El capitán retirado del Ejército ha negado haber pedido tales favores y ha afirmado que se enteró del caso cuando salió en la prensa. Bolsonaro también ha negado haberse vacunado contra la Covid-19. Desestimó repetidamente la importancia de las vacunas y las medidas de distanciamiento social durante la pandemia, a pesar de que el Covid-19 mató a más de 700.000 personas, mientras que su gobierno ignoró varios correos electrónicos de la farmacéutica Pfizer ofreciéndole millones de dosis.
El año pasado, la PF incautó el teléfono móvil de Bolsonaro y otros objetos durante una redada en su casa como parte de la investigación del caso.
La esposa de Cid, Gabriela Santiago, admitió que había utilizado un certificado de vacunación falso contra la Covid-19 y culpó a su marido del fraude. Se cree que las tres hijas de Cid, así como la hija de Bolsonaro, de 12 años, obtuvieron estos documentos falsificados. Cid fue detenido en mayo y también ha sido acusado formalmente en el informe policial.
El juez Alexandre De Moraes, del Supremo Tribunal Federal, levantó este martes el secreto que pesaba sobre el expediente de la PF, después de que partes del mismo fueran publicadas por G1 ese mismo día. El magistrado argumentó que ya no había necesidad de mantener el secreto.
Las pruebas recogidas a lo largo de esta investigación son convergentes en demostrar que Jair Messias Bolsonaro actuó con conciencia y voluntad al determinar que su Jefe de Gabinete intermediara en la inserción de datos falsos de vacunación contra el Covid-19 en los sistemas del Ministerio de Salud en beneficio propio y de su hija, señala el informe de la PF.
Bolsonaro partió a Estados Unidos con su familia y ayudantes el 30 de diciembre, tras perder las elecciones presidenciales de 2022. Según el jefe de la PF, Fábio Alvarez Shor, Bolsonaro necesitaba una tarjeta de vacunación falsa para poder entrar en Estados Unidos mientras esperaba el resultado del fallido golpe de Estado del 8 de enero de 2023.
Según la tarjeta de vacunación emitida por el Ministerio de Salud de Brasil, Bolsonaro fue inoculado el 19 de julio de 2021 en la Unidad Básica de Salud (UBS) Parque Peruche, al norte de São Paulo. Sin embargo, Bolsonaro no estaba en São Paulo en esa fecha y el lote de vacunación que figura en el sistema del Ministerio no estaba disponible en el establecimiento donde supuestamente se llevó a cabo la inmunización.