En los últimos días, los centros médicos de Argentina han registrado un número creciente de pacientes con síntomas compatibles con dengue. Según las autoridades, en los últimos ocho meses se han confirmado más de 120.000 casos y 79 muertes. Sin embargo, el gobierno del presidente Javier Milei no seguirá el modelo de Brasil y no se tomará ninguna medida para que el Estado lance una campaña de vacunación obligatoria y gratuita.
Debido al creciente número de casos, los centros médicos ya no realizan pruebas de laboratorio y todo paciente aparentemente infectado por el virus es tratado como un caso positivo, según medios locales.
En Córdoba, donde ya se confirmaron 9.316 casos y siete víctimas fatales en lo que va de 2024, las autoridades anunciaron que en las salas de emergencia no se atiende por orden de llegada, sino que se realiza una primera observación de los síntomas para evaluar a los pacientes más graves.
En la provincia de Salta, el Ministerio de Salud provincial canceló todas las cirugías no urgentes para hacer lugar para pacientes con dengue. En Santa Fe, hasta el 14 de marzo se habían confirmado casi 17.000 casos, más de 10.000 de ellos en Rosario, devastada por la violencia.
En este escenario, los expertos siguen instando a la población a tomar medidas preventivas para evitar la picadura del mosquito Aedes aegypti y eliminar sus criaderos.
Pese a las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el vocero presidencial, Manuel Adorni, dijo que por el momento no es necesaria una campaña de vacunación. Afirmó que con las dos dosis aplicadas con tres meses de diferencia se lograría la inmunidad cuando el mosquito ya dejara de ser una amenaza.
Es un tema que el Ministerio de Salud vigila permanentemente. Cuando haya que cambiar algo en la normativa o la obligatoriedad de la vacuna o que se pueda incluir en el calendario de vacunación, se hará; por ahora, esa decisión no está en la agenda, argumentó Adorni. También afirmó que no está probada la eficacia de la vacuna, lo que es una verdad a medias porque se ha comprobado que el tratamiento Qdenga, desarrollado en Japón, funciona con dos de las cuatro cepas del dengue.
Por supuesto que hay publicidad en caso de que haya alguna emergencia o algún tema que haya que comunicar, por ahora, el caso del dengue no está dentro de esa posibilidad, agregó Adorni.
El último boletín epidemiológico difundido este domingo señaló que ”Durante 2024, de la semana 1 a la 10, se notificaron 102.898 casos de dengue (que representan el 86% de los 120.007 casos registrados en la temporada 2023/2024), lo que representó un aumento de 11,3 veces este año.
El documento también mencionó una incidencia acumulada de 255 casos por cada 100 mil habitantes”, con 248 casos clasificados como dengue grave (0,20%) y 79 defunciones.
En cuanto al comportamiento temporal, se destaca la persistencia de casos a lo largo del período analizado de la temporada 2023/2024 -incluyendo la temporada invernal- y el aumento sostenido en el número de casos desde la semana 40 de 2023 -principios de octubre-, lo que representa un adelanto del incremento estacional respecto de temporadas anteriores a nivel nacional, prosiguió.
Durante la presente temporada se han identificado hasta el momento 3 serotipos circulando en el país: DEN-1, DEN-2 y DEN-3, predominando el DEN-2 seguido del DEN-1. Durante las últimas semanas epidemiológicas, se detectaron 99 casos de coinfección de los serotipos DEN-1 y DEN-2, principalmente en las regiones NEA y Central. No se asociaron a muertes, mostró también el estudio.
En cuanto a los grupos de edad afectados por esta enfermedad vírica, añadieron: ”Aunque se registraron casos de dengue en todos los grupos de edad, entre los 15 y los 64 años la incidencia acumulada es mayor que en la población general (255) y disminuye hacia el final de la vida. La mínima incidencia acumulada se observa en menores de 4 años, con 62 casos por 100.000 habitantes, y un máximo de 335 casos por 100.000 habitantes entre los 25 y 34 años.
El presidente Milei ha culpado a la negligencia del kirchnerismo de no haber hecho una buena campaña hace un año.
El infectólogo Eduardo López, del Hospital de Niños de Buenos Aires, insistió en que los estudios demuestran que las vacunas son seguras y eficaces, mientras que la viróloga Andrea Gamarnik afirmó que Argentina atraviesa la peor epidemia de dengue de la historia mientras el Gobierno desmantela el sistema científico del país.
Cada brote epidémico ha sido superior al anterior durante los últimos años. En 2024 probablemente superemos los casos de la temporada anterior, dijo a Infobae la infectóloga Susana Lloveras.
Teniendo en cuenta que el 90% de los afectados son asintomáticos, deberíamos estar cerca de los 100 mil casos en Rosario y de los 200 mil en la provincia”, subrayó el experto de la Universidad Nacional de Rosario (UNR) Antonio Montero. El núcleo del problema es la urbanización irracional, dijo también.