El aspirante presidencial uruguayo Yamandú Orsi, del opositor Frente Amplio (FA), negó las acusaciones de escándalo sexual en su contra lanzadas por la militante transexual Romina Celeste, del Partido Nacional, también conocido como Partido Blanco, del presidente Luis Lacalle Pou.
Orsi afirmó que las acciones de Celeste eran un juego muy bien tramado al que no estaba dispuesto a entrar. Admitió no saber quién estaba detrás de la operación, pero no descartó emprender acciones legales. En Uruguay no todo puede ser válido, esto es un tema político, de campaña. Hay mucho detrás que no sabemos qué es. Esto no es contra una persona, es contra la democracia, dijo Orsi. Al principio pensé que era una mentira menor, pero es algo más grave, agregó este domingo.
Celeste lo acusó en redes sociales de golpear a una trabajadora sexual transexual. ”Una chica trans de Canelones, especialmente cerca de lo que es el Parque Roosevelt, me contó una experiencia muy lamentable. Este señor, antes de ser intendente (gobernador), decidió pararla, levantarla y pedirle sexo oral. Cuando eso terminó, que ya sabemos a qué me refiero, el tipo la golpeó, la dejó inconsciente, la tiró en el césped y no le pagó”, dijo en X.
Las se defienden cuando se sienten acorraladas! pic.twitter.com/Sxfbn4HZZ3
— ʀᴏᴍɪɴᴀ ᴄᴇʟᴇꜱᴛᴇ (@romina_uy) March 11, 2024
Consultado sobre el impacto de estas denuncias en su vida familiar, Orsi respondió que siempre te afecta pero el tema es tener la preparación espiritual y emocional para esto.
La militancia política de Romina Celeste Papasso Oliver se remontan a 2004, cuando aún era un niño y apoyaba al hoy fallecido ex ministro del Interior Jorge Larrañaga, un destacado político blanco. En un mitin de Larrañaga, un simpatizante del FA quiso pegarme, pero fue rescatado por su abuela.
Más tarde y tras su transición, Romina Celeste se hizo conocida por pintar muros contra la derogación de la Ley de Urgente Consideración (LUC) promovida por Lacalle Pou.
En enero del año pasado, cuando el presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva visitó Montevideo, lo llamó delincuente y escupió a un funcionario municipal, por lo que fue condenada a 7 meses de prisión en suspenso.
El 28 de marzo del año pasado, acusó al senador nacionalista Gustavo Penadés de abuso sexual cuando tenía 13 años, tras lo cual se presentaron más de 20 denuncias contra el político por parte de otras presuntas víctimas.
Penadés negó las acusaciones. Sin embargo, el 8 de junio de 2023, el Senado aprobó por unanimidad el levantamiento de su inmunidad parlamentaria.