Mientras el ministro de Economía Luis Toto Caputo describía las próximas medidas del gobierno, el presidente argentino Javier Milei se presentó en la Plaza República Oriental del Uruguay, en Buenos Aires, para la celebración de la festividad judía de Hanukkah.
Después de tantos años va a salir la luz y eso va a ser una revolución moral, dijo Milei, quien también señaló que las fuerzas del cielo ayudarán a que la luz venza a la oscuridad.
Gracias por invitarme a un acto tan hermoso como encender una vela. Esta celebración es muy importante y más significativa aún en el momento que estamos viviendo en Argentina, dijo el líder de La Libertad Avanza luciendo su kipá.
La principal lección es que la luz prevalece sobre la oscuridad, después de tantos años va a salir la luz y esto va a ser una revolución moral porque vamos a hacerla de valores, agregó.
Los asistentes también oraron por la liberación de los rehenes secuestrados por el grupo terrorista Hamás el 7 de octubre y por los soldados israelíes, los fallecidos, el apoyo al pueblo de Israel y la pronta recuperación de los heridos.
Milei, que se sentó junto al empresario Eduardo Eldstein durante la ceremonia, destacó que Hanukkah marca el triunfo de los pocos sobre los muchos y el poder de la fe de aquellos que, siendo pobres, se impusieron sobre los poderosos y auguró que las fuerzas del cielo apoyarán a Argentina e Israel en este momento.
Tras los discursos, Milei encendió la sexta vela de Hanukkah, acompañado por el rabino Tzvi Grunblat, y celebró que será la primera vez que un Presidente en ejercicio asista a este importante encuentro tradicional de la comunidad judía en sus casi 40 años de realizarse en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
También asistió a la ceremonia el juez de la Corte Suprema Ricardo Lorenzetti, quien destacó la importancia del evento para la defensa de la identidad cultural porque la comunidad judía se vio obligada a renunciar a su identidad. Lorenzetti elogió asimismo la diversidad cultural y la convivencia pacífica de Argentina.