El gobierno uruguayo nombró el jueves a Diego Escuder ministro de Asuntos Exteriores en funciones, tras la dimisión a principios de semana de Francisco Bustillo, envuelto en un escándalo por la expedición de un pasaporte al conocido narcotraficante Sebastián Marset.
Véase también: Canciller uruguayo dimite en medio de un escándalo relacionado con conocido narcotraficante
Hasta el jueves, Escuder se desempeñaba como director general de la secretaría de la cancillería, se informó en Montevideo, mientras que el vicecanciller Nicolás Albertoni fue ratificado.
Escuder tiene una maestría en relaciones internacionales y se desempeñó como jefe de recursos humanos del Parlamento del Mercosur (Mercado Común del Sur) y como asesor parlamentario en asuntos internacionales. También fue profesor de Derecho Internacional, impartiendo Introducción a las Relaciones Internacionales y Análisis de la Actualidad.
Tras aceptar la dimisión de Bustillo, la Vicepresidenta Beatriz Argimón a cargo del poder ejecutivo nombró a Escuder mientras el Presidente Luis Lacalle Pou se encuentra de misión oficial en Estados Unidos para participar en una cumbre de la Alianza para la Prosperidad Económica en las Américas (APEP) organizada por el Presidente estadounidense Joseph Biden.
La salida de Bustillo es sólo la punta del iceberg, ya que tanto líderes de la oposición como miembros de la gobernante Coalición Multicolor insisten en nuevas purgas dentro del gabinete, apuntando específicamente al ministro del Interior, Luis Alberto Heber.
El senador Guido Manini Ríos, líder del Cabildo Abierto, partido de extrema derecha dentro de la alianza gobernante, dijo que el presidente Lacalle debería explicar la actuación de su asesor Roberto Lafluf, directamente involucrado en el escándalo Marset.
Entra un nuevo elemento, que es la Presidencia de la República, porque claramente el señor Lafluf, por lo menos por lo que uno tiene derecho a creer, no está actuando por su cuenta cuando convoca a esta reunión y cuando pide que se falsifiquen algunos documentos, dijo el general retirado del Ejército, quien insistió en que esta crisis no se resolverá sólo con la renuncia de Bustillo.
Marset, prófugo de la justicia e involucrado en el tráfico de cocaína en la región, obtuvo pasaporte uruguayo en 2021 mediante un trámite exprés mientras estuvo detenido en Dubai (Emiratos Árabes Unidos) por intentar ingresar al país con un pasaporte paraguayo falso. En agosto de este año, logró escapar de un operativo policial en Bolivia. En Paraguay, está siendo investigado por el asesinato del fiscal especial Marcelo Pecci, asesinado a tiros durante su luna de miel en Cartagena (Colombia).
A pesar de su salida, Bustillo sigue en la nómina del Ministerio de Relaciones Exteriores. Es un diplomático de carrera que ingresó al Servicio en 1986. Era embajador de Uruguay en España el 2 de julio de 2020, cuando la primera opción de Lacalle Pou para canciller, Ernesto Talvi, presentó su renuncia. Bustillo, hijo de padre diplomático, vuelve así a su puesto en el ministerio, aunque no represente diplomáticamente a Uruguay en el exterior.
Durante su mandato como embajador en Buenos Aires, Bustillo estuvo en el punto de mira de la Justicia argentina en octubre de 2007, en medio de irregularidades en la adquisición de coches para diplomáticos de varias embajadas, pero estuvo a salvo de ser procesado debido a su inmunidad diplomática. Bustillo habría comprado cinco coches de lujo en la capital argentina entre 2005 y 2010.