El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, firmó el viernes un decreto que limita el acceso a las armas de fuego como parte del Programa de Acción de Seguridad para frenar la violencia en el país más grande de Sudamérica, se informó.
El decreto sobre el control responsable de las armas reduce de 4 a 2 el número de armas y su munición para fines de defensa personal. También exige que los solicitantes de permisos demuestren la necesidad efectiva de adquirir armas. Asimismo, reduce de 30 a 6 el número de armas para cazadores, tiradores deportivos y coleccionistas, además de limitar el horario de funcionamiento de los clubes de tiro, que deberán estar a una distancia mínima de un kilómetro de las escuelas.
La medida fue presentada durante una ceremonia en el Palacio de Planalto, junto con el ministro de Seguridad, Flávio Dino. Vamos a seguir luchando por un país desarmado, dijo Lula tras la firma. Los que tienen que estar bien armados son la policía y las fuerzas armadas brasileñas, añadió.
El presidente pretende revertir la proliferación de armas entre los civiles, que avanzó durante el gobierno de Jair Bolsonaro (2019-2022).
Según la ONG Instituto Sou da Paz, en julio del año pasado los cazadores, tiradores deportivos y coleccionistas tenían más de un millón de armas, casi tres veces más que las 350.000 registradas en diciembre de 2018, un mes antes de que Bolsonaro asumiera la presidencia. El decreto representa un paso más para retomar parámetros de responsabilidad y seguridad jurídica en el control de armas en Brasil, dijo el viernes la ONG, en una nota conjunta con el instituto de seguridad pública Igarapé.
El gobierno también presentó proyectos de ley para endurecer las penas contra actos antidemocráticos o atentados contra autoridades, y para elevar las penas contra la violencia en las escuelas. El Ejecutivo asume la responsabilidad por la seguridad pública, en un intento de reducir la violencia, tanto en las ciudades como en la Amazonia, dijo Lula.
Con la nueva norma, el control de cazadores, tiradores deportivos y coleccionistas, clubes de tiro, armerías y otros locales será transferido del Ejército a la Policía Federal.