El Senado francés sacó el viernes una controvertida medida que permite a los investigadores activar a distancia la cámara y el micrófono de los teléfonos móviles de las personas investigadas sin que éstas lo sepan, se informó en París.
Pese a la fuerte oposición de la izquierda, el artículo 3 del proyecto de ley del ministro francés de Justicia, Eric Dupond-Moretti, pretende establecer la geolocalización en tiempo real para determinados delitos y captar sonido e imágenes, lo que quedaría reservado a los casos de terrorismo y crimen organizado. Dupond-Moretti insiste en que la medida sólo afectaría a decenas de casos al año.
Estamos muy lejos del totalitarismo de '1984', la novela de George Orwell sobre una sociedad bajo vigilancia total, dijo Dupond-Moretti. La vida de las personas se salvará gracias a la ley, añadió.
El Observatorio de las Libertades y de lo Digital (OLN) denunció que se trata de un exceso de seguridad, que convierte cualquier objeto conectado en un potencial espía. Los legisladores de los partidos de izquierda intentaron sin éxito eliminar total o parcialmente las disposiciones consideradas desproporcionadas. Según el ecologista Guy Benarroche, esto abre la puerta a la vigilancia generalizada.
Estas técnicas ya se utilizan, aseguró Dupond-Moretti, pero requieren la instalación de balizas o micrófonos y cámaras, lo que entraña riesgos para los investigadores. La disposición está rodeada de importantes salvaguardias, añadió. En concreto, su aplicación debe ser aprobada por un juez y no puede exceder de seis meses.
El Senado aprobó una enmienda impulsada por Bruno Retailleau, del partido Los Republicanos (LR), que limita la posibilidad de utilizar la geolocalización a los delitos castigados con al menos 10 años de cárcel, frente a los 5 años de la redacción inicial.
El artículo 3 del proyecto de ley también prevé, entre otras medidas, la ampliación de los registros nocturnos para los delitos más graves. Además, el Senado aprobó una enmienda del Gobierno que permite ampliar, bajo ciertas condiciones, los plazos de las investigaciones preliminares.
Durante un debate parlamentario a última hora del miércoles, los diputados afines al presidente Emmanuel Macron insertaron una enmienda que limita el uso del espionaje a distancia a cuando esté justificado por la naturaleza y la gravedad del delito y por una duración estrictamente proporcional.