Al menos 31 personas fueron detenidas el domingo durante las elecciones presidenciales de Guatemala, que no han dejado ningún candidato ganador y han obligado a celebrar una segunda vuelta en agosto, según informes preliminares.
Según el Ministerio Público guatemalteco, se han recibido unas 208 denuncias por problemas de propaganda política, transporte de personas y presunta compra de votos. En la localidad de San José del Golfo (27 kilómetros al noroeste de Ciudad de Guatemala), se denunció la presencia de votantes de fuera de la ciudad para beneficiar a un candidato concreto y otras irregularidades.
Se esperaba que la ex Primera Dama Sandra Torres ganara la primera vuelta, aunque no alcanzaría el 50% más un voto necesario para la victoria absoluta. Torres se enfrenta a más de 20 candidatos, entre ellos Edmond Mulet, diplomático de carrera, y Zury Ríos, hija del difunto dictador Efraín Ríos Montt.
La carrera para suceder al conservador Alejandro Giammattei, limitado por ley a un mandato, se ha visto ensombrecida por la decisión de un tribunal de bloquear a cuatro candidatos, entre ellos el primer favorito, el empresario Carlos Pineda, que calificó la decisión de fraude electoral.
Las encuestas pronostican actualmente que Torres, ex esposa del fallecido presidente Álvaro Colom (2008-2012), perderá probablemente una segunda vuelta, dada su falta de popularidad en Ciudad de Guatemala. Esta es la tercera vez que la política de 67 años se presenta a las elecciones presidenciales. En las dos anteriores quedó segunda.
Alrededor de 9,3 millones de electores eligen un nuevo Congreso, cientos de alcaldes y 20 miembros del Parlamento Centroamericano, además de presidente y vicepresidente.