Contrariamente a la Reserva Federal que esta semana decidió una pausa en el incremento de tasas, el Banco Central Europeo (BCE) elevó este jueves sus tipos de interés un cuarto de punto, hasta el 4%, el mayor nivel desde la creación del Euro, en vista de que la inflación subyacente sigue manteniéndose elevada. La subida de tipos anunciada hoy entrará en vigor a partir del próximo día 21 de junio.
Tras la reunión del Consejo de Gobierno, el BCE informó que también incrementa en 25 puntos básicos la facilidad de crédito, a la que presta a los bancos a un día, hasta el 4,25 %, y la facilidad de depósito, a la que remunera a los bancos el exceso de reservas a un día, hasta el 3,50 %.
El BCE explicó en un comunicado que la inflación ha disminuido, pero se prevé que siga siendo demasiado alta durante demasiado tiempo, por lo que el Consejo de Gobierno está determinado a asegurar que a medio plazo vuelva a situarse en el objetivo del 2 %.
Según la institución, las subidas de tipos previas se están transmitiendo con fuerza a las condiciones de financiación y están afectando gradualmente a toda la economía, ya que los costes de financiación aumentan y el crecimiento de los préstamos se ralentiza.
El BCE espera que dicho endurecimiento de las condiciones de financiación frene cada vez más la demanda y de esta forma contribuya a que la inflación siga disminuyendo hacia el objetivo del 2 %.
Con respecto a decisiones futuras, la institución con sede en Fráncfort empleó la misma fórmula que en ocasiones anteriores y anticipó que se guiarán por la meta de asegurar que los tipos se sitúen en niveles lo suficientemente restrictivos como para controlar la inflación.
Dichas decisiones seguirán basándose en la valoración de las perspectivas de inflación teniendo en cuenta los nuevos datos económicos y financieros, de la dinámica de la inflación subyacente y de la intensidad de la transmisión de la política monetaria.