El senador uruguayo Sebastián Da Silva (Partido Nacional) impulsará la prohibición de la fabricación e importación de carne artificial o de laboratorio porque Uruguay, como país ganadero, tiene que ser pionero en la lucha contra este tipo de proteínas de laboratorio, artificiales, y debe defender el verdadero alimento natural, se informó en Montevideo.
Da Silva también subrayó que estos productos experimentales envenenan a las personas y no son seguros. También habló de varios informes donde pueden aparecer alimentos que atentan contra la salud.
Además, el legislador subrayó que la actividad de estos laboratorios que producen este tipo de alimentos aumenta el calentamiento global. Da Silva insistió entonces en que la producción uruguaya de pasto tiene una huella de carbono neutra y recordó que ya existen prohibiciones similares en el país sudamericano, como la que penaliza el suministro de hormonas de crecimiento al ganado.
Da Silva señaló que su propuesta deberá ser discutida en el seno del Partido Nacional y negociada con la coalición oficialista Multicolor, a la que pertenece.
A nivel internacional, no hay mucha legislación sobre el tema. En marzo, el Gobierno italiano de Giorgia Meloni prohibió la producción y venta de estos alimentos, lo que, según el ministro de Sanidad, Orazio Schillaci, fue una decisión basada en el principio de precaución, según el cual no hay pruebas científicas que excluyan efectos nocivos relacionados con el consumo de alimentos sintéticos.