El Índice Nacional de Precios al Consumidor Amplio (IPCA) de Brasil, que mide la inflación oficial del país, alcanzó el 0,71% en marzo, desacelerándose en relación a febrero, cuando fue del 0,84%, y alcanzando el nivel más bajo desde enero de 2021, se anunció el martes.
En marzo de 2022, el IPCA alcanzó el 1,62%. Este año, el índice acumula una suba del 2,09%, y en los últimos 12 meses, del 4,65%, inferior al 5,60% registrado en el periodo inmediatamente anterior, se informó también.
La mayor repercusión (0,43 puntos porcentuales - pp) y la mayor variación (2,11%) del índice el mes pasado procedieron del grupo de Transportes. Con una suba de precios del 8,33%, la gasolina representó el mayor impacto individual en el índice de marzo (0,39 pp) y pesó mucho en el comportamiento del grupo. El etanol avanzó un 3,2%. Los datos fueron publicados el martes por el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE).
El analista André Almeida explicó que el retorno de la recaudación de impuestos federales a principios de mes fue la razón del aumento de la gasolina y el etanol. Los resultados de la gasolina y el etanol fueron influenciados principalmente por el retorno de la recaudación de impuestos federales a principios de mes, establecido por la Medida Provisional 1157/2023. Hubo, por lo tanto, la previsión del retorno de la recaudación del PIS/Cofins sobre estos combustibles a partir del 1 de marzo, dijo.
También en el grupo de transporte, el gas vehicular registró una caída del 2,61% y el gasóleo, del 3,71%. Los billetes de avión, que habían bajado un 9,38% en febrero, cayeron esta vez un 5,32%. Los reajustes de las tarifas de taxi en Belo Horizonte, de autobús interurbano en la región metropolitana de Río de Janeiro y de autobús urbano en cuatro zonas cubiertas por el índice también influyeron en el comportamiento del Transporte.
En la secuencia de aumentos se situaron la sanidad y los cuidados personales (0,82%) y la vivienda (0,57%). En ambos casos se produjo una desaceleración con respecto a febrero, aportando 0,11 pp y 0,09 pp, respectivamente. El grupo de salud y cuidados personales se vio presionado, especialmente, por el avance del 1,20% en los seguros de salud, que siguen incorporando las mensualidades de los nuevos y antiguos planes referidos al ciclo 2022-2023. En el grupo de vivienda, el mayor impacto (0,09 pp) provino de la electricidad residencial, que subió un 2,23%.
La bajada de los alimentos a domicilio, que pasó de un máximo del 0,04% en febrero a un retroceso del 0,14% en marzo, fue la causa del aumento del 0,05% de los alimentos y bebidas. Otro grupo que subió (0,5%) fue el de comunicaciones. Por el contrario, el grupo de artículos para el hogar, que bajó un 0,27% tras subir un 0,11% en febrero, fue el único que registró un descenso este mes.
Las variaciones negativas en marzo de los artículos televisión, equipos de música y ordenadores (-1,77%) fueron los principales responsables del comportamiento del grupo. Las promociones realizadas durante la semana del consumidor, que tuvo lugar en marzo, pueden haber influido, informó el analista.
En las mediciones regionales, todas las zonas avanzaron en marzo, registrándose la mayor variación en Porto Alegre (1,25%). Las causas fueron los altos precios de la gasolina (10,63%) y de la electricidad residencial (9,79%). Fortaleza, con una subida del 0,35%, presentó la menor variación del mes, con caídas del 17,94% en el precio del tomate y del 2,91% en el de los pollos.
Según el IBGE, el IPCA se calcula con base en las familias con ingresos de 1 a 40 salarios mínimos que viven en las regiones metropolitanas de Belém, Fortaleza, Recife, Salvador, Belo Horizonte, Vitória, Río de Janeiro, São Paulo, Curitiba, Porto Alegre, además del Distrito Federal y las ciudades de Goiânia, Campo Grande, Rio Branco, São Luís y Aracaju.
(Fuente: Agencia Brasil)