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Lula da Silva vuelve al poder tras vencer a Bolsonaro por escaso margen

Lunes, 31 de octubre de 2022 - 10:55 UTC
Lula recibió muchas felicitaciones pero no la tendrá fácil Lula recibió muchas felicitaciones pero no la tendrá fácil

El expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva volverá al poder por tercera vez tras derrotar este domingo en el balotaje al actual mandatario Jair Bolsonaro, por un margen muy estrecho, que refleja una enorme división en el gigante sudamericano.

El ícono de la izquierda latinoamericana, de 77 años, se impuso por el 50,9% de los votos frente al 49,1% del ex capitán del Ejército, de 67 años, con casi el 100% de los votos escrutados.

En su primera reacción en Sao Paulo, Lula llamó a la unidad de los brasileños. “A nadie le interesa un país dividido y en permanente estado de guerra”, dijo.

También se dirigió a la comunidad internacional: “Brasil ha vuelto” y dejará de ser un “paria”, prometió. También aseguró que luchará contra la deforestación porque el planeta necesita una “Amazonia viva”, citó AFP.

La diferencia de votos entre ambos candidatos es de dos millones a favor de Lula, sobre un total de 156 millones de votantes.

“Fue la victoria más ajustada para una segunda vuelta” en unas elecciones brasileñas, dijo a la AFP el politólogo Leandro Consentino, del instituto de investigación Insper de Sao Paulo. “Brasil va a tener un gran cambio de gobierno, con la mitad de la población descontenta”, resumió.

El estallido de júbilo en la emblemática Avenida Paulista de Sao Paulo, donde se congregaron miles de votantes de Lula, fue inmediato.

“Brasil está retomando el camino después de cuatro años de oscuridad, la población estaba sintiendo miedo y pasando por muchos problemas”, dijo a la AFP Larissa Meneses, de 34 años.

Bolsonaro ha lanzado mensajes contradictorios sobre si reconocería los resultados en caso de derrota. El viernes aseguró que lo haría: “Quien tenga más votos gana”.

En la explanada de los Tres Poderes de Brasilia, donde cientos de bolsonaristas se concentraron para esperar los resultados, Ruth da Silva Barbosa, una profesora de 50 años, aseguró que “el pueblo brasileño no va a tragar una elección falsa como ésta.” “Bolsonaro tiene que tomar una decisión ya”, dijo.

- “Todo va a cambiar”

La campaña acentuó la polarización en el país, dividido entre un movimiento conservador y aquellos con una visión progresista, en línea con la diversidad social de Brasil.

Lula “representa muchas cosas, la igualdad de género, la libertad. Todo va a cambiar”, dijo entre lágrimas Carolina Freio, una funcionaria de 44 años del barrio carioca de Copacabana.

“Para nosotros, el regreso de Lula es muy importante, intentó demarcar nuestras tierras, tenía proyectos”, dijo a la AFP el chamán Saha da Silva, del grupo indígena Sateré-Mawé, que votó en su comunidad de Iranduba, a 80 km de Manaos, capital de la Amazonia.

Lula, que gobernó Brasil entre 2003 y 2010, cuenta con el apoyo de los más pobres y de los resentidos por las políticas y exabruptos de Bolsonaro, como los jóvenes, las mujeres y las minorías. Prometió “arreglar el país”, aún afectado por la crisis de la pandemia y sus 688.000 muertos. En su campaña destacó sus logros socioeconómicos, como la salida de la pobreza de más de 30 millones de brasileños gracias a iniciativas sociales financiadas por el boom de las materias primas.

En este tercer mandato no tendrá la misma bonanza: aunque la economía muestra signos de mejora, con crecimiento, menos inflación y más empleo, está lejos de la prosperidad de los años 2000. Tampoco lo tendrá fácil en el Congreso, donde los conservadores son mayoría.

Lula volvió a la arena política el año pasado, después de que sus condenas por corrupción fueran anuladas por motivos procesales. Estuvo encarcelado durante 19 meses, especialmente en el escándalo “Lava Jato” sobre una red de sobornos en la estatal Petrobras.

Bolsonaro, ex capitán del ejército, buscó la reelección defendiendo los valores tradicionales y la reciente mejora de los datos económicos -desaceleración de la inflación y caída del desempleo-, al tiempo que seguía inculcando un discurso nacionalista. Un mensaje especialmente apreciado por la agroindustria y la población evangélica, que representa un tercio del electorado y sigue expandiéndose por el país.

El nuevo presidente tomará las riendas de Brasil el 1 de enero.

Brian Winter, redactor jefe de Americas Quarterly, predijo un “gobierno débil” para Lula: “Estará bajo escrutinio desde el primer día y se enfrentará a un Congreso hostil”, dijo.

Lula fue felicitado inmediatamente por el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, que elogió las elecciones “libres” y “justas”.

También lo hicieron los presidentes de Colombia, México, Chile, Venezuela, Argentina, Francia, Canadá y Uruguay, entre otros. “Lula. Alegría”, tuiteó el joven presidente de Chile, Gabriel Boric.

(Fuente: AFP)