Grupos conservadores de Argentina han presentado una demanda penal contra la ministra de Salud Carla Vizzotti y otros funcionarios del Gobierno por promover la esterilización de adolescentes a los 16 años, según se ha informado.
Los miembros de la Asociación de Mujeres Americanas (AMA) quieren que Vizzotti sea procesada por incumplimiento de deberes y otros delitos punibles.
La fundadora de AMA Mercedes Moreno Klappenbach calificó la iniciativa del gobierno como siniestra, nefasta y perversa, además de ser contraria a la Constitución Nacional y al Pacto de San José de Costa Rica.
Klappenbach y Pilar Santucci aseguran que la resolución del Gobierno incita a la mutilación de órganos indispensables para la reproducción.
Me choca que esto sea lo único que ofrece el ministro de Salud a los jóvenes. Hay quienes se van del país y para los que se quedan, es la esterilización masiva y definitiva. Es un disparate. Quiero pensar que Vizzotti se equivocó porque, como la edad para votar es de 16 años, pensó que esa era la mayoría de edad, pero no lo es, dijo Moreno Klappenbach a Infobae.
El sitio web del Ministerio de Salud sostiene que según la Ley 26.130 de intervenciones quirúrgicas de anticoncepción, de 2006, se establece que desde la mayoría de edad las personas pueden tener ”acceso libre y autónomo a la anticoncepción quirúrgica (ligadura de trompas y vasectomía).
El Ministerio afirma que a los 16 años es cuando se alcanza la mayoría de edad y lanza folletos en los que invita a niños de hasta 13 años a informarse sobre los métodos anticonceptivos, subrayando que pueden hacerlo sin estar acompañados por adultos.
Esta bajada de línea, que los chicos vayan sin padres para que no se sientan incómodos para hablar, es utilizada por el gobierno para dar anticonceptivos a los jóvenes y que tengan una sexualidad promiscua porque es negocio para ellos. Vizzotti, que es la funcionaria que debería velar por la salud de los niños, está haciendo lo contrario al promover esta práctica, dijo Moreno Klappenbach.
Asimismo, recordó que cualquier lesión a una persona, aún con su consentimiento, y más aún cuando ese consentimiento es dado por un menor, como en estos casos si no responde a necesidades médicas comprobadas, convierte en delito al profesional que lo causa dolosamente.
Moreno Klappenbach se mostró sorprendida, preocupada y angustiada porque los padres no han salido a protestar masivamente. También admitió que se siente impotente ante el silencio de los senadores y diputados.
La fundadora de AMA insistió en que estas políticas antinatalistas hacen que cada vez haya menos argentinos y lamentó que para el Ministerio del Mal, el embarazo sea una enfermedad, y la vida, una epidemia a combatir.
La Iglesia católica, a través de su Comisión Episcopal, y las confesiones evangélicas, a través de ACIERA, también se pronunciaron en contra de esta campaña contra la dignidad de la persona.
Varias agrupaciones porteñas repudiaron asimismo el intento de control de la natalidad y la propaganda destinada a que las adolescentes den su consentimiento para que el Estado las mutile.
(Fuente: Infobae)