El Primer Ministro de la República Democrática del Congo, Jean-Michel Sama Lukonde, y la Ministra de Medio Ambiente, Eve Bazaïba, subrayaron que el continente africano es responsable de sólo el 4% de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero.
Los funcionarios hicieron estas declaraciones en una reunión previa a la Cumbre del Clima COP27, que comenzó en Kinshasa.
Los funcionarios anfitriones también señalaron que África absorbe más de lo que emite, mientras que Bazaïba hizo un llamamiento a los países para que respeten sus compromisos financieros y apoyen los planes para ayudar a compensar los daños climáticos de aquí a 2024.
El Secretario General de la ONU, Antonio Guterres, instó a los dignatarios de más de 50 países a que la comunidad internacional llegue a un compromiso de nivel cuántico en esta materia. La reunión informal de Kinshasa está preparando el terreno para la conferencia anual sobre el cambio climático (COP27) que se celebrará del 6 al 18 de noviembre en la ciudad egipcia de Sharm el Sheikh. La Vicesecretaria General de la ONU, Amina Mohammed, advirtió que todos los indicadores sobre el clima van en la dirección equivocada.
A menos que se haga un esfuerzo global... nadie escapará, dijo Bazaiba el lunes. Todos respiramos el mismo aire.
El ministro egipcio de Asuntos Exteriores, Sameh Shoukry, subrayó la necesidad de financiación, de acuerdo con una promesa derivada de la COP15 de Copenhague en 2009, de proporcionar a los países en desarrollo 100.000 millones de dólares anuales para hacer frente al cambio climático.
Bazaïba insistió en que estos desembolsos ya no deberían clasificarse como ayuda al desarrollo, sino como una inversión en el futuro de la humanidad.
En su intervención en la cumbre informal a través de una conexión de vídeo desde los edificios principales de la ONU en Nueva York, Guterres insistió en un compromiso a nivel cuántico entre los países ricos, responsables de gran parte de las emisiones de carbono de la humanidad, y los países más pobres, que suelen sentir más profundamente los efectos del cambio climático. El diplomático nacido en Portugal también subrayó que las recientes catástrofes naturales suponen una lucha a vida o muerte por nuestra propia seguridad hoy y nuestra supervivencia mañana.
Un tercio de Pakistán se inundó. El verano más caluroso de Europa en 500 años. Las Filipinas golpeadas. Toda Cuba en un apagón. Y aquí, en Estados Unidos, el huracán Ian nos ha recordado brutalmente que ningún país ni ninguna economía es inmune a la crisis climática, dijo Guterres.
La financiación disponible actualmente es una miseria en relación con la magnitud de los desastres a los que se enfrentan y se enfrentarán las naciones y las personas vulnerables, dijo también Amina Mohammed al comienzo del evento de tres días.
El rey Carlos III de Gran Bretaña, defensor del medio ambiente desde hace tiempo y que el año pasado desempeñó un papel destacado en la COP 26 de Glasgow cuando aún no era monarca, ha anunciado que no asistirá a la COP 27 por consejo de la primera ministra Liz Truss.
Mi vida, por supuesto, cambiará al asumir mis nuevas responsabilidades, dijo el Rey Carlos en un mensaje transmitido tras la muerte de su madre. Ya no me será posible dedicar tanto tiempo y energías a las organizaciones benéficas y a los temas que tanto me preocupan. Pero sé que esta importante labor continuará en las manos confiables de otros.