La ministra de Defensa de Chile, Maya Fernández, comparecerá este martes ante el Congreso para informar a los legisladores sobre el escándalo de la filtración de correos electrónicos confidenciales entre altos mandos militares.
Después de que el general Guillermo Paiva renunciara a su cargo de Jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas por el incidente, se ha designado al vicealmirante José Luis Fernández para reemplazarlo de manera interina.
La diputada Camila Flores ha anunciado que le gustaría conocer el alcance de la información filtrada y si ésta pone en peligro al país y de qué manera, al tiempo que ha insistido en exigir responsabilidades por el grave percance, ya que la renuncia de Paiva sería insuficiente.
El senador socialista Gastón Saavedra señaló que la ministra Fernández tiene una responsabilidad política en el caso y que en el Congreso debe entregar la información necesaria para avanzar en las investigaciones.
El senador independiente Kenneth Pugh cuestionó la capacidad del gobierno para proteger la seguridad del país en el ciberespacio y se ha comprometido a promover mejoras en las áreas de ciberseguridad e inteligencia.
Los senadores de la Comisión de Defensa han propuesto acelerar la aprobación de la Ley Marco de Ciberseguridad, y que se cree una nueva Agencia Nacional de Ciberseguridad para el año 2023, especialmente después de este episodio de hackeo.
El general de brigada Mario Grez Casanueva ha sido designado como fiscal para dirigir la investigación sumaria administrativa del hackeo de los correos electrónicos.
El grupo de hacktivistas Guacamaya accedió a los sistemas de correo electrónico de la organización en mayo. En las próximas horas se harán públicos los correos electrónicos de empresas privadas, pero también de Perú, El Salvador, Ecuador, Colombia y México, que están directamente relacionados con la inteligencia militar, según la prensa.