Los investigadores argentinos consideran que el sospechoso brasileño que perpetró el atentado contra la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner el pasado jueves no actuó solo. Su novia también ha sido detenida.
El martes se hicieron virales unas fotos, supuestamente tomadas meses antes del atentado, de Fernando Sabag Montiel y su novia Brenda Uliarte posando con una pistola Bersa como la utilizada en el fallido atentado.
Según medios de Buenos Aires, el caso va más allá de Sabag y Uliarte e involucraría a un grupo de odiadores.
Uliarte, de 23 años, se negó a declarar el martes al ser interrogada por la jueza María Eugenia Capuchetti. Había sido detenida el domingo después de que se encontraran inconsistencias entre su testimonio original y las pruebas.
Su primer abogado de oficio renunció alegando que ya representaba a Sabag y que su estrategia de defensa podría colisionar con los intereses de Uliarte, a quien se sitúa en las inmediaciones del apartamento de CFK en el momento del atentado y se cree que sabe más del fallido intento de asesinato de lo que está dispuesta a admitir.