Las autoridades uruguayas anunciaron que dejarán de exigir a los viajeros extranjeros declaraciones juradas sobre su estado de salud, además de conceder exenciones fiscales en hoteles y restaurantes a partir del próximo mes.
El ministro de Turismo, Tabaré Viera, dijo que los extranjeros no residentes tendrán derecho a un tipo cero en el impuesto sobre el valor añadido (IVA) en la gastronomía, los servicios de restauración para eventos y el alquiler de coches.
La medida se extenderá entre el 1 de septiembre de 2022 y el 30 de abril de 2023, y no suprime el reembolso del 10,5% para el alquiler de viviendas y el descuento del 30% en el combustible de los visitantes que conducen sus propios coches.
Es un esfuerzo del Gobierno para hacer a Uruguay más atractivo desde el punto de vista económico, dijo Viera, quien también subrayó que estos beneficios suelen lanzarse exclusivamente para la temporada de verano.
El funcionario también anunció que se está trabajando en la eliminación de la declaración jurada online de COVID-19 que se exige desde octubre de 2021, antes de la reapertura de las fronteras del país por la pandemia. También se exigía a los viajeros una prueba de PCR en las 72 horas previas a la llegada y un certificado de vacunación contra la enfermedad. La prueba PCR sigue siendo una condición para viajeros no vacunados. Los extranjeros también deben tener una prueba de seguro médico contra el COVID-19 para la duración de su viaje.