Varias escuelas en Antofagasta han suspendido las clases presenciales mientras sigue aumentando el número de casos de COVID-19 en todo Chile.
Autoridades sanitarias nacionales informaron este jueves de un aumento constante del número de infecciones por COVID-19, con 11.525 nuevos casos, con el mayor número de pacientes en el norte del país.
Los casos activos ascendieron a 37.742, mientras que las muertes confirmadas por el Departamento de Estadísticas e Información de Salud (Deis) fueron 65, lo que eleva el número total de víctimas mortales relacionadas con el coronavirus a 59.698.
La positividad también aumentó al 15,44% en todo el país, según datos procedentes de 45.840 pruebas de PCR.
La peor positividad se registró en Antofagasta (1.340 kilómetros al norte de Santiago), con un 21,67% que llevó a 13 colegios a suspender las clases presenciales, seguido de Coquimbo (470 kilómetros al norte de Santiago), con un 19,58%; y O'Higgins, 80 kilómetros al sur de la capital, con un 19,22%. El área metropolitana de Santiago se sitúa en el 12,01%. En Santiago viven más de 18 millones de personas.
En cuanto a las hospitalizaciones, el Ministerio de Salud informó que había 165 pacientes en Unidades de Cuidados Intensivos (13 menos que hace una semana y 8 menos que hace dos semanas), de los cuales 112 estaban con soporte de ventilación mecánica. En total hay 234 camas disponibles, según fuentes del Ministerio.
La funcionaria de salud de Antofagasta, Jéssica Bravo, insistió en que los estudios epidemiológicos demostraron que el coronavirus tiende a propagarse cuando los estudiantes y empleados que tienen síntomas asociados a la patología asisten a clases. Recalcó que si un profesor o trabajador de la educación, o un alumno tiene una afección respiratoria, debe hacerse la prueba, aunque sospeche que es una situación menor, como un resfriado y esperar el resultado.
También señaló que hubo un descenso en la percepción de riesgo respecto al COVID-19. De ahí la necesidad de que alumnos, profesores y trabajadores sigan usando mascarillas y mantengan un adecuado distanciamiento social, además de otras medidas sanitarias.
Bravo había pronosticado a principios del mes pasado que a finales de julio habría un pico de contagios de COVID-19.