MercoPress, in English

Viernes, 29 de marzo de 2024 - 08:15 UTC

 

 

Diputados chilenos crean comisión para investigar vuelos de Conviasa

Miércoles, 13 de julio de 2022 - 10:35 UTC
A los legisladores no les gustaron los informes de la inteligencia chilena que decían que no había nada raro en esos vuelos A los legisladores no les gustaron los informes de la inteligencia chilena que decían que no había nada raro en esos vuelos

La Cámara Baja de Chile aprobó este martes la creación de una comisión especial para investigar el caso del Airbus A-340-600 con matrícula venezolana YV-3533 que lleva los colores de la aerolínea de bandera Conviasa y que habría aterrizado unas 13 veces en Santiago este año, probablemente transportando pasajeros iraníes con intenciones poco claras, se anunció.

El antiguo avión de Mahan Air es uno de los que Teherán entregó a Caracas como parte de un acuerdo que también incluía el Boeing 747-300 de Emtrasur actualmente incautado por las autoridades argentinas.

La semana pasada, un grupo de senadores chilenos de la opositora Renovación Nacional presentó una denuncia formal ante el Ministerio Público para que se investiguen los cinco vuelos que se sabe que realizó ese avión, que resultaron ser al menos 13, según datos más recientes.

Se trata de la misma aeronave que llevó al presidente venezolano Nicolás Maduro a Teherán en junio y que ya está siendo investigada en Argentina por al menos cuatro vuelos a Buenos Aires entre abril y mayo de este año.

El fiscal Jorge Abbott centró su investigación en la identidad de los tripulantes de cada uno de los vuelos, pero los legisladores están ahora especialmente interesados en el vuelo del 22 de junio, pocos días después del incidente de Emtrasur en Buenos Aires.

Según Emol, 89 pasajeros viajaron en el primer tramo del vuelo desde Venezuela, y 135 regresaron desde Santiago al aeropuerto de Maiquetía, en Caracas. Según los informes, el avión habría aterrizado en Chile con una tripulación de 17 personas y 450 maletas y 550 maletas en el vuelo de regreso.

Los diputados Andrés Jouanett y Francisco Undurraga, quienes promovieron la iniciativa, argumentaron que “no se sintieron satisfechos” con la respuesta dada por el Organismo de Inteligencia a la ministra del Interior, Izkia Siches, al afirmar que no había nada inusual en esos vuelos. Los vuelos comerciales de Conviasa a Chile se iniciaron después de que la administración izquierdista del presidente Gabriel Boric Font firmara el 6 de marzo un memorando de entendimiento con la de Nicolás Maduro para “ampliar el espectro de la relación aerocomercial Venezuela-Chile”. En ese documento se acordó que Conviasa operaría la ruta Caracas-Santiago. “Firmaron un acuerdo con una aerolínea que tiene sanciones internacionales por parte de Estados Unidos y está vinculada a grupos considerados terroristas”, argumentó la senadora Paulina Núñez.

Conviasa y Mahan Air están en la lista negra de la Casa Blanca y las sanciones pueden alcanzar a cualquiera que asista a sus aviones de cualquier forma. De ahí que el problema del 747 de Emtrasur 747 para repostar en Argentina incluso antes de que un juez ordenara su incautación. En 2020, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos también definió que cualquier empresa extranjera con intereses comerciales en Estados Unidos debe bloquear cualquier operación con Conviasa, de la cual Emtrasur es una filial de carga.

Según medios de comunicación chilenos, el capitán del vuelo del 22 de junio era Antonio José Cabriles Lobos, un ex teniente de la Fuerza Aérea Venezolana conocido por su participación en el intento de golpe de Estado de noviembre de 1992 contra el gobierno democrático del presidente Carlos Andrés Pérez, que causó más de 170 muertos. La sublevación pretendía liberar al teniente coronel Hugo Chávez Frías, detenido desde su sublevación en febrero del mismo año.

Cabriles Lobos se presenta en su cuenta de Linkedin como piloto de Conviasa y capitán de Airbus 340.

Era el segundo intento de derrocar a Pérez ese año. El primero tuvo lugar en febrero y fue liderado por Hugo Chávez, que en ese momento estaba en prisión. Este segundo intento fue una “cola” del primero. Precisamente, el objetivo de algunos de los insurgentes, además de establecer un nuevo gobierno, era liberar a Chávez.

Cabriles Lobos sirvió después en el grupo de transporte aéreo presidencial en los años de Chávez y fue nombrado “Director Encargado del Instituto Universitario de Aeronáutica Civil” con el grado de “coronel”. El 21 de febrero de 2011, Cabriles figura como director de operaciones de Conviasa en un comunicado de prensa en el que se anuncia la ruta Caracas-La Habana.

Categorías: Política, Venezuela, Chile.
Tags: Conviasa.