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Diputado argentino Milei a favor del comercio de órganos humanos
¿Por qué todo tiene que estar regulado por el Estado? - argumentó Milei El diputado libertario argentino Javier Milei se mostró a favor de la venta de órganos humanos para trasplantes porque “es un mercado más”. Tras suscitar polémicas entre las autoridades que coordinan estas operaciones, Milei insistió en que en un mercado libre los trasplantes “funcionarían mucho, mucho mejor”.
El presidente del Instituto Nacional Central de Coordinación de Ablación e Implante (INCUCAI), Carlos Soratti, respondió que las declaraciones de Milei eran “absurdas”.
Soratti agregó en una entrevista televisiva que en “ningún país del mundo” los trasplantes son “un mercado como cualquier otro.”
“El sistema de trasplantes de órganos en Argentina funciona con un alto nivel de confianza por parte de la sociedad y una actitud solidaria muy positiva”, añadió.
“Cada día se realizan entre cinco y seis trasplantes” en todo el país, señaló también Soratti.
Preguntado sobre si dejar los trasplantes a merced de las reglas del mercado mejoraría el mecanismo actual, Soratti insistió en que “esta cuestión lleva un siglo de retraso, desde el debate bioético que desarrolló la historia del trasplante de órganos”.
“En aquella época, la principal causa de necesidad de un trasplante era la insuficiencia renal, que sigue siendo hoy la mayor lista de espera. La extracción de un órgano de un individuo sano se consideraba un delito en cualquier país del mundo, por lo que todos los países desarrollaron normativas específicas”, añadió.
A principios de los años 90, la Asamblea Mundial de la Salud dictó los principios rectores de los trasplantes y los marcos normativos. Luego se elaboraron “documentos adicionales para luchar contra el 'turismo de trasplantes' y el comercio de órganos”, señaló también Soratti.
Ahora todos los organismos reguladores de todos los países luchan contra estos fenómenos“, prosiguió.
Milei había dicho en una entrevista radiofónica que la venta de órganos era ”un mercado más“ y se preguntaba ”por qué todo tiene que estar regulado por el Estado“.
”Mi primera propiedad es mi cuerpo, ¿por qué no voy a poder disponer de mi cuerpo, por qué el Estado va a disponer de mi cuerpo, cuando en realidad me roba más del 50% de lo que genero?“, argumentó Milei.
”Es decir, hay un doble rasero: para que el Estado me esclavice, entonces sí, pero si yo quiero disponer de una parte de mi cuerpo por la razón que sea, ¿cuál es el problema?“, dijo el legislador.
”Es una decisión individual. Es decir, ¿quién soy yo para interferir en el cuerpo de otra persona? La persona que decidió venderle el órgano, ¿de qué manera afectó la vida, la propiedad o la libertad de otros? ¿Quién eres tú para determinar lo que tiene que hacer con su vida? Si es su vida, su cuerpo, su propiedad....“.
”Hay estudios realizados en Estados Unidos que demuestran que, si se liberan esos mercados, funcionan mucho mejor y tienen menos problemas. Es cada uno el que debe decidir”, agregó Milei.
A principios de esta semana, el congresista también había lanzado otra idea polémica, aunque ya en uso en algunas partes de Estados Unidos: que las cárceles se privaticen y los reclusos paguen su estancia con trabajo.
