El Gobierno de Uruguay acordó permitir el ingreso al país de personas vacunadas contra el COVID-19 sin más pruebas ni hisopados a partir del 1 de abril, se anunció este viernes.
“Quienes no hayan padecido la enfermedad COVID-19 dentro de los últimos 10 a 90 días previos al embarque o arribo al país y que no puedan acreditar haber recibido la dosis única o las dos dosis, según el tipo de vacuna que se les suministre contra el SARS virus CoV-2 aprobado por su país de origen, adicionalmente deberán acreditar resultado negativo de una prueba de detección del virus SARS CoV-2 (por técnica de biología molecular PCR-RT, antígenos o técnicas de diagnóstico aprobadas por el Ministerio de Salud Pública [de Uruguay], realizada no más de 72 horas antes del inicio del viaje (siempre que el pasajero se encuentre en tránsito), en un laboratorio autorizado en el país de origen o tránsito”, señala el decreto del Gobierno.
Los niños menores de 6 años están exentos de la medida. Sin embargo, deben cumplir con el uso de máscara facial y observar el distanciamiento social, entre otras precauciones sanitarias.
No se permitirá el ingreso al país de personas diagnosticadas con COVID-19 o con síntomas del mismo dentro de los últimos siete días previos a su llegada a Uruguay.
El presidente Luis Lacalle Pou se reunirá el lunes con el ministro de Salud, Daniel Salinas, para evaluar más a fondo la situación actual. “Todos los días me despierto con la intención de poner fin a esta emergencia”, había dicho Lacalle el mes pasado. Sin embargo, la supresión total de la emergencia sanitaria en medio de una disminución de casos se retrasa por razones tanto sanitarias como administrativas, según El Observador de Montevideo.
La razón principal es el Fondo Coronavirus, que recibirá un financiamiento de US$ 400 millones hasta 2022, según anunció la ministra de Economía, Azucena Arbeleche. Este fondo, que en 2021 entregó US$ 1.153 millones, se utiliza para subsidios de desempleo o enfermedad y gastos hospitalarios, así como para cubrir exenciones otorgadas a sectores afectados por la pandemia y campañas de pruebas de COVID-19. Según Lacalle, ese Fondo sumaba US$ 1 millón diario.