Chile elige a su nuevo presidente este domingo. Pero para ser más precisos y dado que ningún candidato aparece en condiciones de alcanzar una victoria en la primera ronda, lo que el país sudamericano está votando es solo la clasificación para la segunda vuelta del 19 de diciembre.
El candidato conservador (de extrema derecha) José Antonio Kast y el izquierdista Gabriel Boric han sido señalados por la mayoría de las encuestas como los favoritos para alcanzar la ronda decisiva, con al menos la mitad de los 15 millones de votantes aún indecisos y que podrían inclinarse en cualquier dirección, particularmente tras la crisis social de 2019 y la nueva Constitución en proceso de redacción.
En este escenario, Chile debe elegir entre un cambio de modelo y la promesa de orden y seguridad.
Según las últimas encuestas, Kast se ve favorecido para ocupar el primer lugar el domingo con Boric no muy atrás, lo que significa que bien podría terminar al revés. Después de todo, no habría ninguna diferencia hasta diciembre.
Se espera que la candidata demócrata cristiana (centro) Yasna Provoste ocupe el tercer lugar.
Pero las encuestas de Chile tienen un historial de graves errores de cálculo, que se remontan a las recientes elecciones en las que se eligió a los miembros de la Asamblea Constituyente. Por lo tanto, estos pronósticos no deben tomarse demasiado en serio, particularmente cuando algunos de los candidatos, como Boric y Franco Parisi, se han mantenido alejados de la campaña debido a las pruebas positivas de COVID-19 que los mantuvieron aislados durante los últimos días.
Si en octubre de 2019 estalló el descontento social contra un modelo neoliberal impuesto por el régimen militar, la campaña presidencial ha sacado a la luz el surgimiento de una extrema derecha latente a la que Kast encarna como el verdadero sucesor filosófico del ex dictador Augusto Pinochet.
La alternativa a Kast sería un Boric mucho más joven y como representante de una coalición formada por Apruebo Dignidad – Frente Amplio y el Partido Comunista.
Sebastián Sichel, candidato del partido del presidente saliente Sebastián Piñera, terminaría en cuarto lugar, aunque a más de 15 puntos porcentuales por detrás de Provoste.
Desde que la votación dejó de ser obligatoria en Chile en 2012, la participación ha caído drásticamente por debajo del 50%. El cambio legal ha propiciado la existencia de tres grupos de ciudadanos: los que están acostumbrados a votar siempre, los de la generación más joven que pueden votar o no según quién esté en el menú y los que simplemente se mantienen alejados de los comicios. Los analistas creen que si las generaciones más jóvenes se presentan en los puestos electorales, la victoria es de Boric. Por otro lado, si no lo hacen, Kast se convertirá en presidente.
Además de presidente, los chilenos también votarán el domingo por senadores, diputados y concejales regionales. Los actuales candidatos presidenciales llegaron a esta instancia tras superar las elecciones primarias del 18 de julio.
La lista de candidatos es la siguiente:
- Gabriel Boric (Frente Amplio del Pacto Apruebo la Dignidad)
- José Antonio Kast (Republicanos por el Frente Social Cristiano)
- Yasna Provoste (DC para el nuevo pacto social)
- Sebastián Sichel (Independiente del pacto Chile Podemos Más)
- Eduardo Artés (Unión Patriótica)
- Marco Enriquez-Ominami (PRO)
- Franco Parisi (Partido Popular)
Para ser elegido presidente, un candidato debe obtener la mayoría absoluta de los votos. En el caso de los legisladores, se aplica el sistema D'Hondt.
Kast ya se postuló para La Moneda en 2017, cuando obtuvo el 7,93% de los votos. Entre sus propuestas está la construcción de zanjas en las zonas fronterizas del norte para evitar el paso de inmigrantes ilegales.