Barcos de la Segunda Guerra Mundial que se hundieron cerca de las islas Ogasawara han resurgido debido a la actividad sísmica en la región, se informó.
La isla de Iwo Jima, donde tuvo lugar una de las batallas más sangrientas de todo el conflicto bélico, se ha elevado sobre el nivel del mar como resultado de erupciones submarinas registradas en las últimas semanas, trayendo barcos hundidos hace más de 75 años.
Aparentemente, los barcos fueron hundidos mientras intentaban construir un puerto en la isla, aunque otros informes afirman que se trataría de unidades japonesas hundidas por los estadounidenses.
Japón está formado por 6.852 islas y la actividad volcánica y sísmica es permanente, con una larga historia de terremotos y tsunamis. Se estima que en tierra y bajo el agua hay unos 110 volcanes activos.
La costa de Iwo Jima, donde emergieron los barcos, está a 1.200 kilómetros de Honshu, la isla principal de Japón, donde se encuentran las ciudades de Tokio, Osaka e Hiroshima. Las erupciones recientes han provocado incluso la formación de una nueva isla en agosto pasado.
Otros informes afirman con certeza que se trataría de barcos japoneses hundidos durante la batalla de Iwo Jima en 1945. Imágenes de satélite han mostrado los restos fantasmales de las 24 embarcaciones de transporte varadas en la costa.
Las imágenes fueron obtenidas por All Nippon News luego de un aumento en el lecho marino debido a la actividad del Monte Suribachi en el oeste de la isla de Iwo Jima.
Los barcos están asentados sobre una capa de ceniza volcánica y los expertos dicen que los temblores del monte Suribachi podrían indicar una próxima erupción.
La playa negra de Iwo To, antes conocida como Iwo Jima, fue tomada por asalto por tropas estadounidenses en 1945.
Setsuya Nakada, del Centro de Promoción de Investigaciones de Volcanes, dijo que el área del mar descolorida se ha extendido a las áreas circundantes, lo que indica que la actividad volcánica aún no ha disminuido y que existe la posibilidad de una gran erupción en Iwo Jima.
Durante la guerra, los japoneses movieron los barcos de transporte para formar un rompeolas, protegiendo el puerto de las olas y así proteger a otras naves que descargaban tropas o armas.
La batalla de Iwo Jima resultó en 21.000 soldados japoneses muertos y sólo 216 hechos prisioneros.