La vacunación masiva contra el COVID-19 de más de 1,5 millones de niños chilenos de entre 6 y 11 años comenzó este lunes en las escuelas, se informó.
Las autoridades chilenas también han confirmado que el medicamento CoronaVac de Sinovac será el administrado, pero solo a aquellos niños que tengan el consentimiento de sus padres.
La nueva fase de vacunación durará hasta la semana del 18 de octubre, pero cada escuela estará sujeta a turnos de acuerdo con los planes establecidos a nivel comunitario a través de los centros locales de atención primaria.
Dado que el tratamiento es voluntario, se requiere el consentimiento de los padres para la administración de los medicamentos, pero el Ministerio de Educación no ha establecido ninguna formalidad específica sobre cómo debe expresarse dicho consentimiento. Por lo tanto, todos los mecanismos son válidos, se informó.
Mientras tanto. Alrededor de una decena de niños de la escuela Delfina Alarcón de Colliguay, en la comuna de Quilpué, se han visto involucrados la semana pasada en una confusión de vacunas en el puesto de inmunización de Correos local.
Unos 13 niños de primaria habían sido inoculados con vacunas que no correspondían a su edad y sexo, situación que los funcionarios del Servicio de Salud no tuvieron en cuenta e incluso preguntaron a los propios niños qué vacunas se les había administrado.
Mauricio Hidalgo, presidente del Comité de Padres, explicó que a 13 niños no se les había entregado una tarjeta de vacunación y ahora no está claro qué medicamento se le había administrado a cada receptor.
Los niños de 4º, 5º y 8º grado habían recibido vacunas erróneamente contra el covid-19, o contra el virus del papiloma humano (VPH) o el fármaco DPT, que es contra la difteria, el tétanos y la tos ferina.
La situación se detectó después de que los profesionales de la salud se dieron cuenta de que tenían más que suficientes vacunas, después de lo cual el personal admitió que no estaban seguros de cuáles o cuántos niños se habían visto afectados.