El presidente de Paraguay, Mario Abdo Benítez, expresó este viernes ante la 76ª Asamblea General de las Naciones Unidas su “profunda decepción” por la falta de respuesta del mecanismo Covax en la distribución de inmunizadores COVID-19 en todo el mundo.
En su comparecencia virtual desde Asunción, Abdo también agradeció a aquellos países que se han solidarizado con el pueblo paraguayo para avanzar en su vacunación contra la pandemia.
“Cada discurso es más que palabras”, dijo Abdo. “Podemos generar un espacio de reflexión profunda y sincera”, agregó.
El mandatario paraguayo también destacó la importancia de la solidaridad y la empatía, que “son vitales para enfrentar una pandemia como esta, cómo países con una velocidad encomiable avanzaron rápidamente en la producción de vacunas, pero también sacaron a la luz algunas realidades que debemos enfrentar.
A continuación, Abdo subrayó el hecho de que las vacunas ya pagadas por su gobierno a través del “mecanismo Covax recomendado por la Organización Mundial de la Salud para garantizar una distribución equitativa” no habían llegado a tiempo.
“Paraguay siempre ha apostado por el multilateralismo, porque entendemos que problemas comunes que trascienden a nuestros países requieren una respuesta conjunta”, prosiguió.
Añadió dijo que la ONU necesitaba evaluar lo sucedido y (...) poder generar cambios para el futuro.
“Destaco la cooperación de países amigos y hermanos que desinteresadamente extendieron su mano solidaria al pueblo paraguayo a través de la cooperación de vacunas que nos permitieron salvar vidas y avanzar con el programa de inmunizaciones”, señaló Abdo, quien mencionó a los Estados Unidos. Qatar, India, España, México, Chile, Colombia, los Emiratos Árabes Unidos y Uruguay. “Nuestro país nunca lo olvidará”.
Abdo luego describió la economía de Paraguay y enfatizó que esperaba un acceso efectivo para nuestros productos a los mercados de los países más desarrollados en un contexto de recuperación pospandémica.
Al respecto, el mandatario destacó el “ambicioso proyecto del Corredor Bioceánico que estamos llevando a cabo”, que “unirá el Océano Atlántico con el Océano Pacífico” y resaltó el giro de Paraguay hacia fuentes de energía limpia y renovable, así como la conexión entre el cambio climático y la actual crisis del agua que afecta a nuestra región”.
Abdo también explicó que “el terrorismo, el narcotráfico y el crimen organizado transnacional son amenazas reales”, por lo que “Paraguay se compromete a combatir su financiamiento y en particular el lavado de dinero” de actividades que, enfatizó, involucraron la “práctica despreciable” de utilizar niños para sus actos delictivos.
“Para fortalecer la gobernanza democrática y un sistema de toma de decisiones más equilibrado en las Naciones Unidas, consideramos que se debe fortalecer el papel de la Asamblea General y se debe considerar la reforma del funcionamiento del Consejo de Seguridad”, concluyó Abdo antes de citar al Papa Francisco: “La esperanza es audaz, sabe mirar más allá de la comodidad personal de las pequeñas seguridades y compensaciones que estrechan el horizonte, para abrirse a grandes ideales que hacen la vida más bella y digna, caminemos en la esperanza”.