El Gobierno de Argentina decidió aumentar las restricciones aplicadas a viajeros procedentes del exterior a partir de este sábado, en una medida para evitar que nuevos casos de la variante del Delta del SARS-Cov-2 ingresen al país.
De acuerdo con las nuevas disposiciones, se permitirá un máximo de 600 pasajeros diarios a través del aeropuerto internacional de Ezeiza en Buenos Aires y estarán sujetos a aislamiento obligatorio en los lugares que determinen los gobiernos de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) o de la Provincia de Buenos Aires (PBA).
Hasta el viernes ingresaban al país un promedio diario de 2000 pasajeros.
Quienes regresen del exterior entre el 1 de julio y el 31 de agosto deberán estar confinados a su cargo durante 10 días a partir de la prueba realizada en el país de origen. Serán alojados en instalaciones como hoteles determinados por las autoridades sanitarias de PBA y CABA.
El Gobierno también ha anunciado que se llevarán a cabo más controles para garantizar que quienes observan cuarentenas obligatorias en sus hogares cumplan con las mismas se enfrenten a cargos penales punibles con hasta dos años de prisión.
Los viajeros deberán someterse a una prueba para poder abordar el avión con destino a Argentina. Además, deberán ser reexaminados a su llegada al país y, una vez más, al séptimo día después de la entrada.
Quienes den negativo al ingresar al país, deberán cumplir con el aislamiento en sus lugares designados y deberán someterse a una nueva prueba antes de ser liberados.
Quienes resulten positivos al ingresar al país, deberán realizar otra prueba de secuenciación genómica y, junto con sus contactos cercanos, realizar el aislamiento en los lugares indicados por las autoridades nacionales, hasta su traslado seguro a su residencia, si correspondiere. En esos casos, los viajeros deberán indicar su intinerario durante los últimos 14 días antes de volver a ingresar al país.
Al igual que ocurre con las estancias en lugares de aislamiento, el pasajero debe pagar las pruebas de laboratorio.
La ministra de Salud, Carla Vizzotti, recomendó evitar los viajes al extranjero, en particular de grupos, ya sean por motivos recreativos, académicos o sociales.
Para los pasajeros que llegan a través de cruces terrestres, las jurisdicciones provinciales deben proporcionar corredores seguros. Incluso los extranjeros no residentes que ingresan para realizar trabajos esenciales deben ahora cumplir con las cuarentenas obligatorias, se anunció.