El gobierno argentino del presidente Alberto Fernández confirmó este miércoles la decisión de abandonar el llamado Grupo de Lima, un consorcio formado además con Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Guatemala, Honduras, México, Panamá, Paraguay, Perú, Guyana y Santa Lucía. Barbados, Estados Unidos, Granada y Jamaica para aislar a la administración venezolana encabezada por Nicolás Maduro.
La medida argentina implica un gesto de apoyo a Maduro, así como un rechazo al líder opositor Juan Guaidó. Argentina se había unido al Grupo en 2017 bajo el entonces presidente Mauricio Macri para buscar una solución democrática a la crisis social, política y económica en Venezuela.
La Cancillería argentina dijo este miércoles en un comunicado que ”las acciones que el Grupo (de Lima) viene impulsando a nivel internacional, buscando aislar al Gobierno de Venezuela y sus representantes, no han conducido a nada y ... la participación de un sector de la oposición venezolana (en referencia a Guaidó) como un miembro más del Grupo de Lima ha llevado a la adopción de posiciones que nuestro Gobierno no ha podido ni puede acompañar ”.
Continuó el comunicado: Reiteramos que la mejor forma de ayudar a los venezolanos es facilitando un diálogo inclusivo que no favorezca a ningún sector en particular, sino lograr elecciones aceptadas por la mayoría con control internacional.
Porque “en un contexto en el que la pandemia ha causado estragos en la región, las sanciones y bloqueos impuestos a Venezuela y sus autoridades, así como los intentos de desestabilización ocurridos en 2020, solo han agravado la situación de su población y, en particular, el de sus sectores más vulnerables”, explicó el gobierno argentino. En este espíritu, Argentina seguirá manteniendo su compromiso con la estabilidad en la región y buscará orientar soluciones pacíficas, democráticas y respetuosas con la soberanía y los asuntos internos de cada Estado.
El Grupo de Lima se creó en 2017, cuando se intensificaron las marchas opositoras y la represión que dejó al menos 127 muertos en Venezuela, para buscar una salida a la compleja situación interna, que empeoró en 2019 luego de que el líder opositor Juan Guaidó se declarara presidente interino con el apoyo de algunos artículos de la Constitución venezolana.
Este grupo multinacional ha considerado ilegítimas las elecciones celebradas en mayo de 2018, que dieron la victoria al presidente Nicolás Maduro para el período 2019-2025, y aplicó sanciones políticas y económicas al régimen chavista, exigiendo a Maduro que dimita y ceda el poder a la disuelta Asamblea Nacional. Maduro ha repudiado estas declaraciones.
Los kirchneristas de línea dura en Argentina celebraron la decisión del gobierno de dejar un grupo que creen que fue una creación inspirada por el ex presidente Macri, su entonces colega estadounidense Donald Trump y los aún presidentes de Chile y Colombia, Sebastián Piñera e Iván Duque, respectivamente.