Brasil advierte que la crisis continua que vive Argentina influye sobre el comercio bilateral y las negociaciones del bloque de Mercosur con la Unión Europea, las cuales ya se encuentran bastante distantes por las severas críticas de los gobiernos de Alemania y Francia.
El vicepresidente de Brasil, Hamilton Mourao, afirmó que la crisis en Argentina ha generado un momento particularmente complicado en el Mercosur, que pone en jaque el acuerdo comercial alcanzado con la Unión Europea (UE), ya golpeado por las críticas de Alemania y Francia antes los incendios forestales en la Amazonía.
El Mercosur está viviendo un momento particularmente complicado porque nuestro gran socio comercial, que es Argentina, vive en una crisis continua, dijo Mourao, quien aclaró que no se refería a las diferencias ideológicas entre los gobiernos del Jair Bolsonaro y Alberto Fernández.
En una teleconferencia organizada por cámaras de comercio de ambos países, Mourao se quejó en forma velada de los atrasos en que, según empresas de Brasil, estaría incurriendo Argentina en la renovación de licencias de exportación, lo cual estaría trabando el ingreso de algunos productos brasileños al país vecino.
Según fuentes del sector comercial, las trabas para la renovación de las licencias de exportación estarían afectando, entre otros, al sector automovilístico de Brasil, que tiene en Argentina uno de sus más grandes mercados externos.
Mourao no entró en detalles, pero sí insinuó que esos problemas pudieran repercutir hasta en el tramo final de las discusiones del acuerdo comercial anunciado a mediados del año pasado por la UE y el Mercosur (Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay), que aún debe ser ratificado por los parlamentos de todos los países implicados.
Ese gran esfuerzo de negociaciones del año pasado puede empezar a hacer agua, consideró el vicepresidente.
En ese marco, también insistió en que dentro de la UE existen interesados en hacer naufragar el acuerdo con el Mercosur, entre los que mencionó a agricultores incapaces de competir con Brasil y a los activistas ambientales, que creen inocentemente que la Amazonía está siendo destruida y que eso se refleja en el calentamiento global.
Al respecto, Angela Merkel, canciller de Alemania, ha reiterado en varios actos públicos sus serias dudas con respecto al futuro del acuerdo comercial entre la UE y los países del Mercosur, precisamente por la amenaza ecológica que se cierne sobre la Amazonía en Brasil.
En concreto la canciller Merkel insistió en sus fuertes preocupaciones por la continua deforestación y los incendios, que se han multiplicado en las últimas semanas en la Amazonía. Somos escépticos, afirmó su portavoz Steffen Seibert.
La Amazonía afecta al mundo entero, añadió. Es la primera vez que Merkel expresa tales críticas sobre este pacto, que van en sintonía con denuncias hechas por Francia, Austria y Holanda con respecto a la crisis medioambiental en Brasil, que podría poner freno al acuerdo entre Mercosur y la UE.
Mourao aludió también a los efectos que ha tenido en el Mercosur la pandemia de coronavirus, que ha ralentizado todas las relaciones comerciales, y dijo que a pesar de que los números absolutos de Brasil son peores, la situación en Argentina también es delicada.