El Fondo Monetario Internacional (FMI) se pronunció a favor que el gobierno argentino y los acreedores continúen con las negociaciones para reestructurar la deuda por un monto total de casi US$ 67.000 millones.
Esperamos que todas las partes involucradas continúen comprometidas y sigan negociando con miras a llegar a un acuerdo, dijo el vocero del FMI, Gerry Rice, durante la habitual conferencia de prensa que brinda cada jueves por medio.
Como hemos dicho antes, las negociaciones entre las autoridades argentinas y sus acreedores son un asunto de la Argentina y esos tenedores de bonos”, agregó Rice.
Y continuó: ”Por supuesto, estamos siguiendo los desarrollos muy de cerca. Esperamos que todas las partes involucradas continúen comprometidas y sigan negociando con miras a llegar a un acuerdo.
Por último, el vocero ratificó que el gobierno argentino no ha hecho una solicitud para suscribir un nuevo programa con el FMI, ni ningún tipo de desembolso del programa vigente.
El tema Argentina fue uno de los principales ejes de la conferencia de prensa que brindó de manera virtual Rice, luego que durante la víspera se informara oficialmente que las negociaciones entre las partes hasta el momento no prosperaron.
Anoche, la cartera económica conducida por Martín Guzmán dio a conocer la nueva propuesta que presentó la Argentina a los acreedores, que no fue oficializada ante la comisión de valores de Estados Unidos, SEC.
También se conocieron la ofertas de los acreedores, tras vencer los acuerdos de confidencialidad rubricado entre las partes.
En el comunicado, el Ministerio de Economía expresó que los Inversores ”respondieron a la información provista por Argentina proponiendo ajustes (...) con los que Argentina no puede comprometerse de manera razonable, algunos de los cuales son ampliamente inconsistentes con el marco de sostenibilidad de deuda que necesita la República para restaurar la estabilidad macroeconómica y para avanzar con un programa con el FMI.
El proceso de negociación con nuestra comunidad inversora reveló que las demandas de los inversores a menudo divergen y no se pueden conciliar fácilmente, agregó el Palacio de Hacienda.
Pese a que se tensó la cuerda de la negociación, ya que el plazo para la oferta vence el viernes, en el mercado aún ven chances de que se pueda alcanzar un acuerdo, al menos con parte de estos grupos.
Están muy cerca”, expresó un analista experto en deuda argentina al evaluar que la última oferta que la Argentina presentada a los acreedores se acerca a un valor presente neto de las deudas de casi 50%, entre unos 5-6 dólares por encima de la propuesta anterior.
La Argentina mejoró las condiciones para los acreedores al proponer una quita de capital de 3% y no de 5% como propuso anteriormente; mientras que la quita total de intereses será menor al 62%. A esto se sumó un pago mínimo de cupones de interés a partir de 2021 y la entrega de un cupón atado a la evolución de las exportaciones, si bien esto último no está especificado en el documento oficial dado a conocer.
En cambio, la posición de los acreedores parece más dispersa, según las presentaciones de los distintos tipos de bonistas. Los que más se acercan a la posición oficial son el Bondholder Group, entre los que se encuentran los fondos Fintech y Gramercy, cuya propuesta alcanzó el 51% de valor presente neto.
Por el contrario, los más duros son los que integran la propuesta conjunta de los tenedores de los canjes 2005 y 2010, los denominados EBG (Exchange Boldholder Group) y el Grupo AD Hoc, entre los que se encuentra BlackRock y Monarch.
Estos piden entre un 54% y un 56% de valor de recupero, según cálculos privados, En un comunicado emitido miércoles por la noche, el grupo que encabeza Blackrock dijo lamentar que la Argentina haya rechazado una solución sostenible y sensata.
Según el grupo Ad Hoc, su oferta contempla una alivio de US$ 38.000 millones en el pago previsto para un período de 9 años. De ese total, US$ 23.000 millones corresponderían a los años 2020 y 2023, entre otras cuestiones.